Cáritas recibe casi un 500% más de dinero por legados en sólo ocho meses

Cáritas recibe cada vez más dinero por la vía de los legados. En la sede central de esta organización de la Iglesia Católica se han disparado los avisos que se reciben desde las notarías dando cuenta de sumas de dinero que se han dejado en favor de Cáritas. Así como siempre han sido habituales las disposiciones de última voluntad donde se refiere a la Iglesia Católica, a los pobres en general o a congregaciones religiosas o hermandades en particular, en los últimos tiempos se han disparado aquellas en las que se menciona expresamente a Cáritas Diocesana. Esta ONG recaudó en 2012 un total de 525.498, 53 euros por la vía de los legados. La gran sorpresa es que de enero a agosto de 2013 ya ha recibido 2.406.022 euros, lo que supone que casi ha logrado un 500% más en solo ocho meses, una cifra que crecerá a finales de año con toda seguridad. Conviene tener en cuenta que Cáritas ingresó el pasado año seis millones de euros (de los que 2,5 fueron en concepto de subvenciones), un dato que, si se hacen las comparaciones, corrobora la importancia de lo recibido a través de los legados en sólo ocho meses: más de la tercera parte de la cuenta total de ingresos de todo un año y casi lo mismo que lo obtenido por subvenciones.

Cualquier persona puede beneficiar a Cáritas en su testamento al amparo del artículo 746 del Código Civil: "Las iglesias y los cabildos eclesiásticos, las diputaciones provinciales y las provincias, los ayuntamientos y municipios, los establecimientos de hospitalidad, beneficencia e instrucción pública, las asociaciones autorizadas o reconocidas por la ley y las demás personas jurídicas pueden adquirir por testamento con sujeción a lo dispuesto en el artículo 38". Y el 179 del Reglamento Notarial aborda cómo debe proceder el fedatario público en estos casos: "Los notarios que autoricen o eleven a escritura pública testamentos en los cuales conste alguna disposición de carácter benéfico o benéfico-docente, o que tenga por objeto fines de interés general, como los de asistencia social, cívicos, educativos, culturales, científicos, deportivos, sanitarios, de cooperación para el desarrollo, de defensa del medio ambiente o de fomento de la economía o de la investigación, de promoción del voluntariado, o cualesquiera otros de naturaleza análoga, remitirán a los órganos administrativos competentes que ejerzan el protectorado sobre las fundaciones creadas para el cumplimiento de dichos fines, una copia simple de la cláusula o cláusulas testamentarias correspondientes, tan luego como llegue a su conocimiento el fallecimiento del testador".

Cáritas se nutre de donativos de particulares y empresas, las cuotas de los suscriptores, los legados y las colectas que se organizan en todas las parroquias los primeros domingos de cada mes. Que cada vez haya más personas que en su testamento hace mención directa de esta entidad, supone para sus responsables que los ciudadanos confian en que el uso final de sus aportaciones será el de cubrir una necesidad, como asevera el director de Cáritas en Sevilla, Mariano Pérez de Ayala: "Los trabajadores y directivos de Cáritas tenemos muy claro que recibimos recursos gracias a la generosidad de las personas y que, por lo tanto, tenemos una responsabilidad en el uso eficaz, austero y con la máxima transparencia de esos recursos. Somos los depositarios de una confianza".

Las aportaciones de los fieles suponen casi la mitad de los ingresos de Cáritas. El pasado año se recibieron 3,4 millones por esta vía, de los que 1,5 procedían de las colectas mensuales en las parroquias, lo que también ayuda a ponderar la considerable subida que están registrando los ingresos por la vía de los legados, ya que en sólo ocho meses se ha recibido en testamenos más de la tercera parte de todo lo que ingresó la organización en 2012.

Cáritas contó a lo largo del pasado año con 9.891 suscriptores. Este año tiene unos 50 menos, pero curiosamente la recaudación por esta vía sube casi un 12,5%. Menos sucriptores, pero más generosos. En 2012 se recaudaron 420.000 euros mediante estas cuotas, el 7% de los ingresos de todo un año. La suscripción media está entre 30 y 40 euros al mes. Hay casos de particulares que tienen suscrita una contribución de 300 euros mensuales e incluso 5 o 10 euros. Y por la vía de los donativos no sujetos a suscripción se han llegado a recibir hasta 100.000 euros de alguna empresa de la ciudad. Este tipo de donativos suelen producirse en el mes de diciembre, antes de Navidad y del cierre de las cuentas de las sociedades.

Cáritas tiene el reto de cubrir ahora un mapa de necesidades en Sevilla que ha experimentado cambios sustanciales en pocos años. Como advierte Pérez de Ayala, la clase media se ha incorporado ya a la población que demanda ayudas: "Había Cáritas parroquiales de barrios de esa clase media en la que los casos de atención eran mínimos, por lo que esas Cáritas se empleaban en colaborar con otras Cáritas de parroquias más necesitadas. Ahora ya no pueden hacer eso, ahora tienen sus propios problemas dentro. Los barrios tradicionalmente con más necesidades tienen ahora todavía más. Y barrios donde no había necesidades han empezado a tenerlas". El perfil de demandante de asistencias que más ha aumentado es de ua persona con más de 45 años a la que se le ha agotado la prestación por desempleo y que sólo cuenta con el subsidio de 400 euros: "Son personas que no están acostumbradas a este tipo de servicios y a las que les cuesta mucho acudir a Cáritas".

El nuevo director de Cáritas considera que no se produce un colapso en los servicios de ayuda, pero sí admite que se han multiplicado y han aparecido nuevas necesidades. Cáritas prepara un programa de becas de comedor en guarderías de barriadas de Sevilla para hijos de inmigrantes sin papeles.