Los vecinos de la calle González Cuadrado han denunciado que los ocupas que soportan desde hace meses en el edificio que alberga el centro de transformación de Endesa han accedido al interior de esta instalación eléctrica, forzando la puerta metálica. Y agregan que esos mismos ocupas han hecho lo mismo en el centro de transformación de la calle San Luis.

Endesa confirmó estelunes a este periódico que los ocupas han forzado las puertas de ambos centros de tranformación situados muy cerca uno de otro, y ambos en la zona Norte del casco histórico.

La compañía eléctrica ha denunciado en los juzgados la ocupación del centro de transformación de González Cuadrado 42, que cuenta con una vivienda anexa que fue ocupada meses atrás. No hay datos de que Endesa haya denunciado aún la entrada en el centro de San Luis. Endesa recuerda que en temas de ocupación la justicia es muy lenta.

El centro de transformación de la calle San Luis.

Detalle del centro de transformación de Endesa en la calle González Cuadrado, con las puertas abiertas.

Los vecinos de González Cuadrado recalcan que la entrada en estos grupos electrógenos de estas personas supone “un gran peligro añadido a una situación de por sí desesperante” y señalan que la ocupación de la vivienda anexa al centro de transformación que denunciaron hace meses no se ha solucionado. “Continúa la ocupación con escándalos, gritos, peleas, amenazas, venta y menudeo de droga y demás lindezas”, denuncian.

Los residentes de esta céntrica calle de Sevilla, cercana a la calle Feria, reiteran su agradecimiento a Endesa por poner los medios legales oportunos y por actuar ante los tribunales.

Pero se quejan de que “la solución a este asunto esté ralentizada y atascada por actuaciones judiciales que, cuando menos, sorprenden a nuestros letrados y a los de Endesa: se pasan la pelota de un Juzgado a otro. Los vecinos afectados esperamos que el tema caiga en manos de un juez o jueza competente y profesional que ponga fin a esta pesadilla”, recalcan.

Los vecinos aseguran que los ocupas se mueven entre ambos centros en patinete y sospechan que tienen negocios de droga. “Se desplazan en patinete eléctrico de un centro a otro y no sería descartable que igual que hacen en nuestra calle se dediquen al menudeo de droga en la zona. Actualmente son varios varones de origen magrebí y mujeres españolas que han desplazado a los yonkis locales. Nos consta que hay otras casetas de Endesa ocupadas, pero no podemos afirmar como en el caso de San Luis y González Cuadrado que sean los mismos”.

La ocupación en González Cuadrado comenzó a finales de mayo. Un grupo de okupas violentos, unos toxicómanos y otros dedicados a la venta y consumo de droga, se instalaron ilegalmente en el edificio de la calle González Cuadrado 42. Se convirtieron en una terrible pesadilla para los vecinos: organizaba duras peleas de las que salen heridos, daban gritos desgarradores mientras se pegaban unos a otros, además de romper todo tipo de objetos y arrojarlos a la calle.