Sevilla solicita al Gobierno un corredor sanitario anticovid en vuelos con París
Aeropuerto
La propuesta municipal se llevaría a cabo con Vueling de forma experimental y ayudaría a estimular la demanda del tráfico aéreo en Europa
Estrategias para levantar el aeródromo de San Pablo
El Ayuntamiento de Sevilla quiere dar un paso más para contribuir a la reactivación del tráfico aéreo, estimulando la demanda de vuelos, conscientes de que éste es uno de los motores para poner en marcha la recuperación económica de la capital. Por ello, ha solicitado formalmente al Gobierno central la puesta en marcha de un ensayo de corredor sanitario anti-Covid en algunos vuelos con París, con el objetivo de que este nuevo método de viaje se convierta en referencia y ayude a activar otras rutas europeas la próxima primavera.
En concreto, la experiencia se llevaría a cabo con la compañía aérea Vueling con los pasajeros de la ruta Sevilla-París (Orly) con el propósito de evaluar la capacidad para implantar un sistema que consiste en la realización de pruebas rápidas de antígenos justo antes de embarcar. Estos test se realizarían en el mismo aeropuerto, donde se destinaría un espacio concreto que cumpla con los requisitos sanitarios y de seguridad necesarios.
La iniciativa evita así la obligatoriedad de guardar cuarentenas en el país de destino y garantiza que el avión esté 100% libre de Covid. Este tipo de corredores de antígenos están siendo probados en Francia y también en Italia. Un ejemplo es el Aeropuerto de Fiumicino, en Roma, que en Navidad empezó a probar un sistema experimental con las compañías Delta Air Lines y Alitalia en vuelos que conectan Italia con EEUU.
El alcalde, Juan Espadas, ha remitido una carta con su propuesta a los ministros de Transporte y Movilidad, Sanidad y Turismo para que evalúen la implantación de este sistema en Sevilla, aunque hay también otros aeropuertos que aspiran a conseguir la luz verde por parte del Gobierno.
Desde el gobierno municipal se destaca la buena sintonía entre el destino Sevilla y la citada aerolínea, Vueling, entre otras, prueba de la confianza que el sector tiene en el aeródromo. Esta seguridad que se transmite desde San Pablo será clave para lograr la autorización del corredor, al igual que el trabajo conjunto y continuo realizado en los últimos meses.
En este sentido, el delegado municipal de Turismo, Antonio Muñoz, recuerda que la intervención del alcalde ante el Gobierno en el inicio de la pandemia ya logró que Sevilla se incluyera en la lista de aeropuertos autorizados para operar. El edil confía en la buena posición que tiene el destino, “que ha hecho sus deberes” pero sigue trabajando en estos días más que nunca en estrategias con aerolíneas que permitirán esa recuperación con las claves de la seguridad en los viajes.
"Hemos sembrado y, pese a la pandemia, recogeremos los frutos"
Las reuniones y contactos con las compañías aéreas han estado y siguen estando durante la pandemia en la agenda de Muñoz y de su equipo técnico. “Es imprescindible recuperar cuando se pueda esas conexiones que están detrás de los buenos resultados históricos que en materia de turismo tuvo Sevilla”, comenta el concejal que hace unos días ha reactivado la mesa de conectividad de la ciudad tras la primera fase de la pandemia y que está convencido de que, después de sembrar mucho, “recogeremos los frutos”.
Según explica el delegado, es la hora de poner en marcha nuevos planteamientos en el seno del plan director 2021-23. También la de desarrollar una agenda de colaboración junto a las aerolíneas de mayor peso en el aeropuerto y pensar en la organización de grandes eventos del sector que coincidan con la finalización de la transformación que está experimentando el Aeropuerto de Sevilla. En concreto, una de las citas que el gobierno municipal quiere atraer a la capital es la edición de Routes 2023. “Sevilla y las compañías nos necesitamos mutuamente”, asegura Muñoz, que adelanta que las aerolíneas siguen haciendo al destino planteamientos muy interesantes que le permitirán estar muy bien posicionados cuando acabe la pandemia, tanto en clave de seguridad como de conectividad. “Transmitir confianza será clave para levantar el vuelo”, añade.
Así es ahora el pproceso para controlar a quien llega del extranjero
Los pasajeros que llegan a Sevilla en vuelos internacionales deben cumplimentar un formulario sanitario en origen y entregarlo en el destino, con el objetivo de que las comunidades autónomas dispongan de los datos para posibles rastreos. La mayoría trae ya esa información en su móvil y se lee en el aeropuerto por código QR; y se les realiza un control primario, con toma de temperatura.
¿Qué ocurre si llega un pasajero con fiebre o con algún síntoma sospechoso? Pasa a un control secundario, donde el personal médico valora su estado de salud y, si se confirma la sospecha, se informa a Sanidad Exterior para que, en caso necesario, organice el traslado a un centro sanitario.
A esos controles antes mencionados, que se establecieron ya en mayo y se reforzaron el 21 de junio con la apertura de fronteras, Sanidad sumó el 23 de noviembre la exigencia de un test PCR negativo realizado en origen a los pasajeros procedentes de países considerados de riesgo. De acuerdo con esas instrucciones, el formulario sanitario incluye ahora la pregunta sobre esa PCR.
Las aerolíneas tienen que informar de esto al pasajero antes del vuelo y, de hecho, algunas comprueban que se dispone de dicha prueba para poder volar. Una vez en el aeropuerto de destino, si el pasajero no acredita que se dispone de dicha prueba, se realiza un test de antígenos. El no traer el test implica sanción por parte de la autoridad competente, tal y como está establecido en la normativa. Sanidad Exterior podrá exigir a los pasajeros que se lo hagan en las 48 horas siguientes. También se realiza test a aquellos que determina el personal sanitario si, al pasar el control primario, observan alguna circunstancia que lo aconsejasen.
Pero no a todos los viajeros que llegan de un país de riesgo se le exige revisar en el aeropuerto el documento que acredita que trae un PCR negativo. Se hace de forma aleatoria, pero sí pasan todos el control para recoger la documentación.
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