Siete de los 18 menores detenidos la noche de Halloween en Sevilla quedaron en libertad este mismo martes, después de ser oídos en declaración. Los otros once pasarán en las próximas horas a disposición de la Fiscalía de Menores, que instruye cada caso. Los arrestados formaban parte de una pandilla que sembró el caos por Los Remedios entre las diez y media y las once y media de la noche de ayer. 

Los adolescentes iban encapuchados y armados con palos, cuchillos, machetes y navajas, con las que golpearon y amenazaron a al menos once personas, siete de las cuales resultaron heridas de distinta consideración. Dos de ellas tuvieron que ser trasladadas al Hospital Virgen del Rocío.

Según informó este martes la Policía, la pandilla comenzó su recorrido de violencia en Triana. Portando armas blancas y objetos contundentes, vestidos de negro y con el rosto cubierto por caretas de plástico y pasamontañas, iniciaron una oleada de robos violentos que se saldó con al menos 11 víctimas hasta el momento confirmadas, de las cuales siete presentan lesiones.

La Policía Nacional no tardó en conocer la noticia a través de las llamadas efectuadas por la ciudadanía al 091, en las que alertaban a los agentes de los hechos que se estaban produciendo. En base a las declaraciones de los testigos y a las características de los autores aportadas por las víctimas, los agentes procedieron a la rápida localización e identificación de un primer grupo de menores, formado por cinco jóvenes que fueron detenidos sobre las 23:30 horas en la calle Virgen de la Antigua.

Posteriormente, y de manera casi simultánea, se llevaron a cabo las detenciones de otros 13 menores en la cercana avenida Flota de Indias. Muchos de los detenidos habían venido a Sevilla procedentes de localidades limítrofes.  

Durante la intervención, los agentes se incautaron de pasamontañas, caretas de plástico, cuchillos de cocina, machetes, navajas y objetos contundentes como palos de madera, que los menores habrían usado presuntamente en la comisión de los atracos.