Un joven pintor vecino de la Plata que deja novia y cuatro hermanos

"Muy trabajador, muy noble, muy bueno. No bebía, no fumaba, todo lo que puedo decir de él es bueno". Así definían este jueves en Su Eminencia a Francisco Javier Muñoz Alcántara, la víctima del segundo crimen ocurrido en el barrio en once días.

Francisco Javier era pintor de brocha gorda, aunque no rechazaba otros trabajos de albañilería ni los que no estuvieran relacionados con el sector de la construcción. "Trabajaba en lo que le salía, porque como está la cosa ahora tampoco se puede elegir". Residía en la Plata, a escasos metros del lugar en el que fue asesinado. Tenía cuatro hermanos -dos hombres y dos mujeres- y ayer mismo tenía previsto celebrar el cumpleaños de uno de ellos. Llevaba más de dos años con su novia, una joven de 23 años que también es vecina del barrio. Ninguno de sus amigos podía entender todavía cómo una riña antigua con un menor del barrio podía derivar en una muerte como la suya.

Uno de sus amigos aseguró que el presunto autor del crimen iba "buscando enfrentamiento", mientras que la víctima "evitaba llegar a tal enfrentamiento con un niño". "Pero hoy ha venido, ha partido el coche de mi amigo y le ha asestado tres puñaladas", indicó este joven, que explicó que todos los amigos están"muy apesadumbrados porque se ha ido una buena persona, de las que quedan pocas".