Triunfo importante para el conjunto sevillista en un partido ante un rival directo actualmente como el Cádiz. La escuadra de Mendilibar supo arremangarse para imponerse al final con claridad gracias a los goles de Ocampos y En-Nesyri.

Ocampos | El que era peor que Januzaj vuelve a su banda predilecta

Ocampos, rodeado, trata de salir con calidad en la banda derecha.

El fútbol se empeña en poner a cada uno en su sitio. Ha venido un entrenador al Sevilla que se puede considerar, sin que sea un menosprecio sino todo lo contrario, de perfil bajo, de currar y dejarse de artificios en el fútbol y lo primero que ha hecho es colocar a Ocampos en la banda derecha, como su mejor pie, donde destacó el primer año junto a Jesús Navas. A Ocampos, dentro de la tensión, se le vio feliz, incluso dio una cacha de las buenas y marcó el primer gol. El que era peor que Januzaj...

Badé | Para el despeje orientado sólo hace falta un día de clase

Badé corta un intento de Rubén Sobrino.

Una de las cuestiones principales en el fútbol es saber elegir siempre la opción correcta, lo que exige una situación de un partido en cada momento. Badé, con sus limitaciones, sabe interpretarlo perfectamente y la lección del despeje orientado la recibió el primer día de ¿infantiles? Pese a ver una tarjeta, no se complicó y dio el pase arriba que acabó en el cero a dos.

Dmitrovic | Dudó por arriba, pero sabe el manual de Mendilibar

Dmitrovic observa a Espino junto a Soto Grado.

El serbio, como figuraba en todos los pronósticos previos sobre la posible alineación, fue el guardameta elegido por Mendilibar y lo principal de todo es que acabó con su portería invicta, como ya ha sucedido en otros partidos. Aunque tuvo una fase con problemas en los balones colgados por el Cádiz, al final lo sacó adelante todo y no tiene el menor rubor para pegarle arriba en los saques.

En-Nesyri | Corre lo mismo y es el gran beneficiado

En-Nesyri dispara con su pierna derecha para convertir el pase de Bryan en el cero a dos.

Sin duda alguna es el gran beneficiado por el nuevo manual balompédico con el que se va a manejar el Sevilla. Se pega la misma paliza a la hora de correr a presionar, incluso un poco menos porque se supone que tiene un acompañante cerca, y encima le ponen los centros en condiciones para tratar de rematarlos. Rozó el gol de cabeza y lo logró en el gran control de Bryan.