Algún día también habrá un Reina bético
Premio al portero de la selección por su gesto con Miki Roqué
Seguramente, algún día habrá un Reina bético. Y, por qué no, un guardameta con tan digno apellido llevando cosido sobre su corazón el escudo con las trece barras verdiblancas, ése que anoche se honró una vez más a espaldas de la primera casa de la ciudad, en la Plaza de San Francisco. Un Reina vistiendo esa camiseta que el pasado 12 de septiembre añadió un lustro a su ya centenaria historia.
Porque el beticismo tiene desde ayer un motivo más para sentirse orgulloso de su club. La Fundación Heliópolis, que desde la llegada del nuevo consejo de administración trabaja a su vera, programó su segundo Foro Heliópolis, cuyo protagonista fue el insigne periodista cuevano Carlos Herrera, quien hiló un discurso tan lucido como ameno, y hasta jocoso por momentos, de la singladura histórica del Betis y de los sentimientos que en él fueron anidando desde que se decidió a abrazar la fe verdiblanca.
Fue el plato principal de una velada memorable, que ya comenzara a hacer Betis con el brillante preámbulo de José Rodríguez de la Borbolla, y que a los postres brindó unas emotivas palabras de Miguel Reina, de quien heredase los guantes el premiado Pepe Reina, primer Galardón Heliópolis por su difusión de los valores humanos del deporte al enfundarse una camiseta verdiblanca de Miki Roqué para celebrar la consecución por parte de la selección española de su tercera Eurocopa de Naciones. "Yo no sé cómo puedes vivir sin ser del Betis", recordó el ex guardameta cordobés al recoger el premio en nombre de su hijo. La frase, según relató, se la dijo un chófer, de nombre Pepe, y se le quedó tan grabada que apostó por hacerla suya anoche.
"El Betis son dos cosas a la vez, el almíbar y la naranja amarga, y se pasa de una a otra sin hacer la digestión", versó Herrera, quien antes ya había hablado de lo "difícil y arriesgado de ser bético por el halo de misterio" que rodea siempre al equipo.
El periodista almeriense, que adobó su verbo fácil con esa voz única que te atrapa, dejó antes de su repaso por la historia del club heliopolitano alguna frase, de cosecha propia, memorable. "Los béticos han hecho al Betis y por eso son nuestro patrimonio tan singular y valioso", elogió a una afición siempre presente, en cualquier discurso, a cada instante en la vida del Betis.
"Viva el Betis manquepierda es el lema corporativo más famoso de España", remató ante un encopetado auditorio: Gordillo, Guillén, los del 77, Curro Romero... Así hasta casi medio millar de béticos, alguno del tercer anillo.
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