Mejorar atrás sin restar arriba

Rueda de prensa de lo más plácida para un Unai Emery que huía de cualquier polémica en el interior de El Madrigal. El entrenador vasco ni siquiera se alteraba cuando se le buscaba alguna respuesta polémica acerca de la presión que le había metido el técnico rival, Marcelino García Toral, al árbitro al hablar de las continuas faltas que realiza el Sevilla a cargo de los dos medios centro.

Era la primera pregunta que recibía el entrenador sevillista después de comparecer con anterioridad Pareja y la respuesta de Emery era más serena incluso de lo previsible. "Lo primero que tengo que expresar es el máximo respeto al Villarreal y en este caso a Marcelino. Pero no voy a hacer valoraciones sobre la forma de jugar del equipo contrario, somos un equipo que se puede catalogar como físico y hay un árbitro que se encarga de juzgar las jugadas de contacto. No creo que en el partido de Liga ese aspecto fuera llamativo, entre otras cosas porque nuestro juego no pasa de lo físico a más. Por tanto, tengo que decir que tengo plena confianza en el árbitro para este partido".

Es el primer apunte de un Emery que posteriormente incluso dará algún matiz más al respecto. La segunda pregunta vuelve a ser sobre lo mismo más o menos, pero el guión está muy establecido en la mente de un hombre que amplía la respuesta a otras cuestiones. "Van a ser 180 minutos o más y se va a quedar fuera injustamente seguro uno de los dos equipos y pondrá a otro en camino hacia algo importante. Cada uno utiliza a su favor todos los detalles y habrá un árbitro al que le doy toda la confianza". Un nuevo rodeo para llegar al mismo punto sobre la responsabilidad que tendrá el encargado de impartir la justicia sobre el césped.

Siguiente cuestión, el favoritismo, en este caso del Sevilla por el hecho de ser el actual campeón de la Liga Europa. "Ser campeones la temporada pasada no nos dice nada en ésta. El año pasado desarrollamos una competición al más alto nivel para ganarla, pero ahora hay que hacerlo otra vez si queremos llegar a ese mismo punto. Lo hicimos contra el Borussia. La realidad me dice que la eliminatoria está muy igualada y que ambos tenemos nuestras opciones", consideraba Emery.

¿Y ese plus que puede suponer la ilusión por revalidar un título? Emery no quiere que nadie le otorgue una ventaja inicial al Sevilla: "Nadie va a regalar nada, la ilusión que podamos tener nosotros y el sevillismo también la tienen ellos. Unido a eso está el potencial, nosotros somos un gran equipo y el Villarreal también y ahí va a estar la disputa. Será muy importante competirla desde el minuto 1 hasta el 180".

De esas valoraciones se pasa a inquirir sobre los futbolistas que están en duda por problemas físicos, o sea, Carriço y Tremoulinas. "Las dudas son menores sobre Carriço, pero mañana tomaremos las últimas decisiones por la mañana. Si somos capaces de asumir que puedan estar de inicio Tremoulinas o Carriço lo haremos, pero el primer paso ya lo hemos dado con la convocatoria".

Al hilo del tema Carriço se pasa a conocer qué piensa Emery sobre los problemas defensivos que viene sufriendo su equipo. "Estamos ocupados en ello. Cuando encajas muchos goles y ganas le das menos importancia, pero cuando ocurre y pierde eso está restando. Mañana queremos ganar, marcar un gol, pero no encajar tres o cuatro porque eso no nos valdría. Queremos ser un bloque fuerte y creemos que la base para lograrlo es la defensiva. Ellos tienen muchas vías de ataque, por dentro y por fuera, y debemos estar pendientes. Pero que eso no nos reste en ataque porque mañana queremos ganar. Tenemos un nuevo examen, de poder retar al Villarreal en su estadio, donde muy pocos equipos han podido ganar y queremos ser nosotros uno de ellos", concluye en un denso análisis.

Y última pregunta, el elogio recibido de parte de José Castro en el aeropuerto de Sevilla antes de partir. "Es un refuerzo de muchas conversaciones continuas que tengo con el presidente, con miembros de la directiva y con Monchi. Me siento muy respetado y ese alto respeto, cuando se hace externo, es verdad que se transmite una idea, una intención. Eso no quita para que sigamos trabajando el partido contra el Villarreal como algo muy trascendente. Pero la satisfacción del trabajo es importante, lo primero que quiere uno es que lo quieran donde está porque es donde mejor lo conocen. Son exámenes que hay que ir aprobando, pero se agradece que por encima de eso haya un reconocimiento". Y asi concluía la rueda de prensa de un Unai Emery que transmitía serenidad y seguridad.