Gómez Sierra pide apoyo a los sindicatos para cerrar un acuerdo laboral urgente

Los sindicatos trabajan a marchas forzadas para buscar una salida a la caja, para buscar una propuesta que evite la intervención y que se adecue a las premisas establecidas por Boston International Group, para hacer viable la integración con Unicaja antes de que desembarquen los inspectores de Banco de España e intervengan.

La urgencia de ayer estaba justificada y cuando Gómez Sierra terminó en Madrid, pasado el medio día, convocó a los sindicatos para contarles la situación que le planteaba el órgano regulador: el día 1, la fusión encarrilada y el 7, aprobada. De lo contrario, una intervención sin garantías laborales. La cosa tomaba el tono castaño oscuro y por ello la jornada terminó con una petición explícita de apoyo a los sindicatos por parte del presidente de la entidad cordobesa.

Así, el máximo responsable de Cajasur acordó con los representantes de los trabajadores una propuesta de mínimos asumibles a la Consejería de Economía y Hacienda y al Banco de España. Para llegar a este acuerdo, nada más salir de su encuentro en el Banco de España, se llamó a Aspromonte, UGT y CCOO. La cita, en Presidencia, fue a las 20:00 y el contenido no pudo ser más claro. Gómez Sierra quería un pacto para llevarlo hoy a la consejera de Economía, Carmen Martínez Aguayo, y explicarle por dónde podrían ir las líneas de recorte laboral que puede asumir Cajasur. Los sindicatos se mostraron conscientes de que recortes debe haber. Saben que la fusión será traumática, pero plantearon que la carga de despidos, cuando los haya, debe ser soportada también en parte por Unicaja. Además, se dará prioridad a las prejubilaciones y éstas nunca se harán en un solo año, sino que deberán prorratearse en el tiempo.

Con estas premisas, los sindicatos y el presidente levantaron el encuentro con el compromiso de que hoy, antes del mediodía pueda haber una propuesta más o menos consensuada para presentar a Martínez Aguayo, con quien se ve Gómez Sierra a las 20:30.

A la misma hora en la que el presidente de Cajasur salía de su reunión en el Banco de España, los sindicados, Aspromonte -central mayoritaria y tradicionalmente auspiciada por la Iglesia católica-, UGT y CCOO mantenían un comité intercentros. Pese a las fuerte división que llevan manifestando las diferentes centrales de la entidad cordobesa desde que se planteó el principio de acuerdo para la fusión de finales del pasado mes de julio, los tres sindicatos llegaron a una postura común, aunque sus posturas sobre la fusión han sido aparentemente irreconciliables.

"Expresamos nuestra posición contraria a la ejecución del plan de negocio planteado por The Boston International Group en lo relativo al excedente de plantilla -se refiere a los mil puestos de trabajo que están en tela de juicio-", señala su acuerdo conjunto, comunicado a todos los trabajadores de la caja por línea interna y a la que ha tenido acceso este diario.