La aceituna de mesa buscará fórmulas para contratar inmigrantes en origen
La falta de mano de obra deja sin recoger el 15% del producto en la zona del Aljarafe sevillano, según Cooperativas
La aceituna de mesa afronta la campaña de verdeo con la incertidumbre de la lluvia y de la falta de mano de obra
La falta de mano de obra está agudizándose en el campo en los últimos años y, en el caso de la aceituna de mesa, el sector y las administraciones ya se están planteando traer contingentes de inmigrantes para que puedan trabajar en la recolección. La medida se tomaría especialmente para la variedades manzanilla y gordal, que son difícilmente mecanizables y para las que se necesita una recogida manual del fruto.
Así lo admite Gabriel Cabello, presidente de Aceituna de Mesa de Cooperativas Agro-alimentarias de España, que afirma que en esta campaña, que ya está finalizando, se ha dejado de recoger entre el 12% y el 15% de la variedad manzanilla en la zona del Aljarafe por esa carencia de personal. Y este año no ha sido especialmente malo. En los anteriores se quedó en los árboles hasta el 20% del fruto, debido a una rápida maduración por el calor, lo que hacía que fuera necesario más personal en menos tiempo. "Este año ha hecho menos calor y la aceituna ha aguantado más tiempo, lo que ha llevado a que la situación no sea tan mala", afirma el responsable de Cooperativas.
Ante esta problemática, Cabello asegura que todas las partes afectadas (agricultores, cooperativas, ayuntamientos y Junta de Andalucía) se sentarán para "ver las fórmulas" para traer a las explotaciones contingentes de inmigrantes contratados en origen. No va a ser fácil, admite, porque, a diferencia de Huelva con las 'berries', las explotaciones en la zona del Aljarafe -la zona más afectada- son pequeñas y familiares, y el trabajo en una de ellas puede ser de solo 5 o 6 días. La solución puede ser que estos trabajadores roten por las distintas parcelas y se afine bien con las localidades donde serían necesarios estos contingentes, añade.
Ahora mismo, la mayoría de los que trabajan en la recolección de la aceituna -que genera mucho empleo en Sevilla en el mes de septiembre- son extranjeros y los españoles que hay "se van jubilando". "El campo es poco atractivo para los jóvenes, es duro y complejo, y los sueldos tienen que ir además en relación a la rentabilidad del agricultor", que, afirma, "es precaria".
No solo faltan temporeros, además. Cabello menciona la carencia de tractoristas, maquinistas o podadores, trabajadores más cualificados que tampoco se encuentran.
La campaña se salva gracias a las lluvias
Por lo que respecta a la campaña que está a punto de finalizar, Cabello afirma que las perspectivas son bastante mejores que a principios de septiembre, cuando se preveían 468.000 toneladas y se temía por que hubiera escasez de producto tras dos campañas anteriores regulares. En la primera semana de recolección se registraron, incluso, precios récord en origen que finalmente se han atenuado bastante, salvo en la variedad gordal.
El último aforo sitúa la producción en 492.000 toneladas, una cifra muy cercana a la media de los últimos años, de 507.000 toneladas. Ello ha sido posible porque las últimas lluvias han beneficiado mucho a la variedad hojiblanca -la predominante en Andalucía-, de la que se pueden recoger entre 230.000 y 250.000 toneladas. A la gordal y la manzanilla las precipitaciones les han llegado tarde, aunque en el caso de la manzanilla la producción, de 160.000 toneladas, estará por encima de la media por la vecería del olivo, que marca que a un año malo (lo fue el pasado, sobre todo en Extremadura) le sucede otro bueno.
La evolución de la gordal es otra historia. Se ha estancado en 20.000 toneladas en las últimas campañas y se han arrancado plantaciones ante la falta de rentabilidad por sus altos costes. En manzanilla y sobre todo en hojiblanca hay posibilidad de molturar la aceituna para aceite -una salida cuando este producto está alto- pero en la gordal no.
Este arranque de árboles en la gordal ha hecho que se dispare el precio y se sitúe en esta campaña entre 2,5 y 2,80 euros el kilo. En el caso de la manzanilla está entre 1,3 y 1,5 y en el de la hojiblanca en 1,2. Son cotizaciones "buenas" y además hay "buenos calibres", pero eso "no garantiza la rentabilidad", debido a que "todos los costes de mano de obra, abonos, fitosanitarios, gasóleo, se han incrementado mucho en los últimos años", afirma Cabello.
También te puede interesar
Lo último
Sonia Díaz Rois, experta en gestión de la ira y autora del libro 'Y si me enfado, ¿qué?'
Esta experta en gestión de la ira nos explica cómo sobrevivir a la cena navideña sin caer en el efecto 'cuñading'