Los padres de un bebé de Écija (Sevilla) que sufrió graves secuelas por una presunta negligencia en la asistencia sanitaria reclaman una indemnización de tres millones de euros, una de las peticiones más grandes que se han solicitado en España, según ha explicado este jueves el abogado Fernando Osuna, que considera que si se hubiera actuado con una mayor celeridad tras la comprobación de las alteraciones que tenía el bebé no se hubiera producido el gravísimo resultado.

Dice el letrado que en este caso se desprendía "a todas luces" que se estaba produciendo un sufrimiento fetal (sospecha de estado asfíctico del feto y el líquido amniótico era meconial), por lo que se debería haber practicado una "cesárea de urgencia y no seguir con el parto vaginal como se hizo".

Añade Fernando Osuna que no se valoró el riesgo grave de secuelas neurológicas que comúnmente se deriva de la asfixia-apoxia y de haberse actuado de otra forma se habrían evitado los daños irreversibles.

El bebé nació en julio 2022 en el Hospital de Alta Resolución de Écija y pesó 3.450 gramos, siendo un parto vaginal espontáneo con presentación cefálica. El examen físico del recién nacido era normal y resultaba significativa la existencia de meconio en el líquido amniótico.

A pesar de esa supuesta normalidad en el examen físico del recién nacido, el mismo precisó "reanimación con mascarilla" y fue trasladado con 16 horas de vida a la Unidad de Neonatología General del Hospital de la Mujer Virgen del Rocío de Sevilla por cefalohematoma e hipoglucemia.

Una terapeuta avanzó las "gravísimas secuelas sufridas" por el bebé "como consecuencia de la nefasta atención que tuvo durante el parto", sostiene la demanda. Entre las secuelas, se destaca la poca intención de movimiento del niño y los movimientos laterales continuos que realiza con la cabeza”.