Terminaba el otro día diciendo que en el mundo feliz pospandemia nos aguardan más barbarie tecno-científica y más consumismo compulsivo. Afortunadamente no sólo eso. También están en nuestro encierro o nos aguardan -haga cada cual su lista- Ella Fitzgerald, John Ford, Galdós y La Campana. Henry Mancini, Howard Hawks, Proust y Ochoa. Billie Holyday, John Sturges, Conrad y El Bar Comercio. Gershwin, Busby Berkeley, Pascal y El Caserío. Cole Porter, Fellini, Dickens y el Don Carlos de General Polavieja. John Barry, Fred Astaire, Svetlana Aleksiévich y la carnicería Roiz de Feria. Georges Delerue, My Fair Lady, Samuel J. Agnon y el Bar Arco. Helen Merrill, Richard Lester, Bashevis Singer y la Panadería Montesión. Michel Legrand, Pasolini, Vassili Grossman y la Antigua Abacería de San Lorenzo. Rodgers & Hart, L' Atalante, Saul Bellow y Casa Ricardo. Rodgers & Hammerstein, West Side Story, Virginia Woolf y el Bar San Lorenzo. Joseph Kosma, Terence Malick, Conan Doyle y La Azotea. Edith Piaf, El Muelle de las brumas, Stevenson y La Papa Que Llevas de Santa Catalina. Jean Wiener, Robin y Marian, Marilynne Robinson y el Bar Santos de Buiza y Mensaque. Georges Van Parys, Hitchcock, Abraham B. Yehoshua y El Rinconcillo. Hadjidakis, Melina Mercouri, Ridder Haggard y el cine Cervantes. Lalo Schiffrin, Jean Renoir, Jane Austen y Los Claveles. Paul Whiteman, Richard Thorpe, las Brontë y Casa Batato. Los Beatles, Chaplin, Thomas Hardy y La Alicantina. Bach, Ozu, Zweig y Casa Rafita ahora de luto. Lerner & Loewe, Billy Wilder, las damas inglesas del crimen y las playas de Huelva. Brahms, David Lean, Camus y el Picadero de Polavieja. Schubert, Matar a un ruiseñor, Chesterton y Cervería Pepe Cruz Casa Pepito de Pío XII. Django Reinhardt, Jacques Demy, Sir James Matthew Barrie y el Ajolí de Cristóbal de Castillejo. Nino Rota, Stanley Donen, M. R. James y Donald (el de Canalejas, no el pato). Morricone, Jean Pierre Melville, Walter Scott y Coronado. Glenn Gould, Lubitsch, Julio Verne y Casa Manolo.

Muchas cosas nos acompañan en el encierro y muchas nos aguardan -las personas, primero- en el mundo pospandemia. A quienes sobrevivan, claro, no a los 22.524 españoles que Casado y Robles -no su presidente- han tenido la decencia de recordar, por los que mañana la Junta pide tres minutos de silencio y por los que el Ayuntamiento declarará día de luto la festividad de San Fernando.