El Betis de Manuel Pellegrini ha declarado el estado de felicidad. Si la temporada ya venía siendo excepcional, ocupando la tercera plaza en la Liga, la victoria ante el Sevilla en la Copa del Rey y la exhibición de recursos ante el Alavés apenas 48 horas después han disparado la ilusión del equipo y de los béticos.

Con este panorama, la visita al RCDE Stadium, un campo tradicionalmente apegado a la causa heliopolitana, aparece en el escenario para seguir disfrutando del fútbol y dejar a un lado todos esos embrollos que sólo sirven para emponzoñar el ánimo de los aficionados. Que los abogados y dirigentes resuelvan sus litigios en un segundo plano, pero que ni Pellegrini ni los suyos se distraigan con una batalla que no les debe incumbir.

Defender la tercera plaza es la bonita tarea que tiene el Betis por delante. Una victoria hoy ante el Espanyol lo dispararía en la tabla antes de que sus rivales disputen sus encuentros, con todo lo de presión que podría significar en equipos como el Atlético de Madrid o el Barcelona, que no están habituados a pasar tantos apuros para sellar su clasificación entre los cuatro primeros.

Alineaciones probables

El mensaje de Pellegrini es rotundo. Centrarse en el partido a partido como única manera de llegar bien posicionado a la recta final y que sea la propia competición la que mida las fuerzas de cada cual. No quiere el técnico chileno pensar en el más allá. Su experiencia le indica que sólo puede controlar lo inmediato y eso pasa por la visita a este Espanyol que eleva su potencia como local. Así lo dicen sus números sobre este buen equipo que ha ahormado Vicente Moreno y que tras ascender de manera brillante se está asentando en la máxima categoría. Quizá le haya faltado madurez en algún momento para aspirar a cotas mayores, pero el conjunto espanyolista dispone de una variada plantilla de calidad, en la que sobresale su goleador, Raúl de Tomás, pero también otros nombres como Puado, Morlanes o Darder.

Si el equipo periquito llega a la cita con apenas un entrenamiento en Barcelona tras su partido del martes en Cádiz, en el que salvó un punto en el instante final, el Betis también acumula esfuerzos en la última semana.

Pellegrini dialoga con Joaquín en el entrenamiento.

Al doble compromiso ante el Sevilla, con ese componente emocional que siempre eleva el desgaste, se añadió el partido del martes ante el Alavés, en el que el equipo bético no bajó la guardia ni con la amplia diferencia con la que llegó al intermedio. Para paliar ese posible cansancio, Pellegrini dispone de casi toda la plantilla –sólo Montoya y Paul se quedaron en casa–, por lo que habrá alguna novedad en el once.

Ahí emergerá la figura de William Carvalho, reservado el martes y que será el encargado de llevar la batuta. Aunque en las dos últimas salidas ligueras el Betis sólo ha sumado un punto –igualada en Vallecas y derrota en San Mamés–, Pellegrini quiere que su equipo mantenga esa imagen que ofreció en dos escenarios tan distintos. Un Betis intenso, que quiera ser protagonista y que salga a ganar desde el inicio. Mantener el estado de felicidad depende únicamente de las victorias, el aliciente más especial para la ilusión de los aficionados.