El espíritu verdiblanco

La temporada avanza y llegan para el Betis dos semanas de partidos muy exigentes en esa lucha por jugar la Liga de Campeones y seguir vivo en la Europa League.

Y la primera cita de nivel la tiene hoy recibiendo en el Benito Villamarín a un Real Madrid necesitado de puntos para seguir peleándole la Liga al Barcelona. Un feudo heliopolitano en el que se vivirá una atmósfera de partido grande por parte de una hinchada verdiblanca que, consciente de las importantes bajas, sin Fekir ni Canales, arropará a los suyos para que aflore ese espíritu de equipo que hace que este Betis compita siempre sea quien sea su rival.

Y no sería la primera vez que los hombres de Pellegrini lo demostrarían, pues ya superaron otras situaciones difíciles, como las vividas el verano pasado con el asunto de las inscripciones, las lesiones de otros jugadores de peso o las ventas de baluartes importantes (Álex Moreno), y siempre el Betis del Ingeniero se sobrepuso. El cuadro verdiblanco, de la mano del preparador chileno, hace mucho tiempo ya que dio un paso adelante en cuanto a carácter y mentalidad competitiva, hasta el punto de que nunca se cae y siempre sale con vida ante cualquier tipo de inconveniente.

A esto, al espíritu de equipo que reina en el vestuario bético, apeló Pellegrini en la previa de un partido para el que dispondrá un once que presenta algunas dudas, empezando por la portería, pues Rui Silva ya está recuperado y se disputará un puesto con Claudio Bravo. En el lateral derecho estaría Sabaly con Luiz Felipe y Víctor Ruiz en el eje de la zaga, y Abner en el lateral izquierdo. Guido regresaría tras cumplir sanción para formar pareja con William Carvalho, apareciendo las principales dudas en la línea de tres mediapuntas, con las opciones de Luiz Henrique, Rodri, Ruibal, Joaquín y hasta Ayoze presentes en el técnico santiaguino, pues Juanmi parece fijo con Borja Iglesias arriba.

El Betis tendrá delante a un Madrid que llega al partido con dudas, después del empate (1-1) ante el Atlético y la derrota (0-1) frente al Barça en la ida de las semifinales de la Copa del Rey, y con las ausencias por lesión de Mendy y Alaba, y del formidable Modric por sanción, amén de Lunin, baja de última hora por una gastroenteritis. Así, Ancelotti maneja diferentes alternativas de cara al posible once inicial, con la posibilidad de meter a un hombre más ofensivo, Rodrygo, junto a Benzema y Vinícius. Para sustituir a Modric la opción de la titularidad de Dani Ceballos, sin minutos el jueves, gana enteros, pues el utrerano es el jugador de todos los centrocampistas del cuadro blanco que tiene un perfil más similar al del croata. No obstante, el técnico italiano podría dotar de más músculo a la medular de su equipo y formar un centro del campo con Tchouaméni, Valverde y Kroos, quedando Ceballos en el banquillo, mientras que Camavinga y Nacho se disputan un puesto en el costado izquierdo de la zaga.

Así se presenta un encuentro entre dos equipos que apuestan siempre por un fútbol ofensivo, con dos ideas de juego muy definidas. Por ello, se prevé una lucha interesante en el centro del campo, donde el Betis debe hacerse fuerte, aunque también los verdiblancos deberán vigilar muy de cerca a un Benzema que suele hacer muy buenos partidos cuando se mide a los de Heliópolis. Y sobre todo, estar acertados ante Courtois en las llegadas de peligro que tengan a lo largo de los noventa minutos. Esos detalles que en el fútbol suelen desnivelar la balanza ante los equipos más poderosos. Y siempre, claro está, con el espíritu de equipo presente.