Las medusas vuelven a las playas de Andalucía: qué hacer y qué no hacer si te las encuentras y te pican

Con la llegada de las altas temperaturas, aparecen las primeras medusas en las costas andaluzas. Estos invertebrados durante el invierno permanecen en el fondo del mar y en la época primaveral proliferan. Las corrientes y el viento juegan un papel muy importante, sobre todo, en el Estrecho con el levante. El cambio climático también ha hecho que estas se multipliquen, ya que ha aumentado la temperatura del mar.

La contaminación marina es otro de los factores que aumenta la presencia de estos invertebrados por las playas. Los vertidos favorecen la aparición de bacterias que alimentan a los copépodos, principal sustento de las medusas. Desde hace varios años, a partir de un estudio de Jairo Castro Gutiérrez, se demuestra un aumento de la presencia de la Pelagia nocticula, o como se le conoce comúnmente, el Clavel de mar, un tipo de medusa de pequeñas dimensiones que emite una luz azul cuando se siente amenazada y pica.

Qué hacer si te pica una medusa

Aunque no haya picado una medusa, es un buen momento para conocer el protocolo que se debe cumplir si se tiene una picadura en el futuro o la padece alguna persona cercana. El Ministerio de Sanidad ha elaborado una serie de reglas para un mejor tratamiento.

En primer lugar, se debe salir del agua con calma y al momento, ya que aumentan las posibilidades de nuevas picaduras. Una vez fuera, si hay socorristas fuera, avisar para que pongan en alerta a otros bañistas y tomen las medidas oportunas. El siguiente paso es eliminar los tentáculos que se hayan quedado adheridos a la piel con unas pinzas, unos guantes o, incluso, una tarjeta rígida. Jamás se debe frotar porque las células restantes seguirán liberando toxinas.

Una vez eliminados los tentáculos, se debe lavar la zona de la picadura con agua salada y nunca con dulce porque las células al entrar en contacto estallarán y verterán el veneno por la piel. Seguidamente, aplicar frío unos 20-30 minutos con un hielo tapado con una tela para reducir la inflamación y el dolor. En la mayoría de los casos, en menos de una hora comienza la recuperación, aunque el picor siga varios días.

Salpas, parece una medusa y han aparecido en las costas andaluzas

Las medusas comparten el agua salada con otros invertebrados que guardan mucho parecido con ellas, pero resultan inofensivos, pero es mejor no tocarlas ni sacarlas del agua. El cambio climático ha propiciado un aumento de su aparición y a diferencia de las primeras, muestran órganos internos más complejos. Se trata de las Salpas, unos seres marinos que filtran grandes cantidades de fitoplancton, que ayuda a regular la presencia de algas y resultan beneficiosas para el medioambiente.

Referencias bibliográficas:

• Distribution modelling of jellyfish in Spanish coastal areas: An approach based on the maximum entropy principle: estudio de Jairo Castro Gutiérrez: https://digital.csic.es/bitstream/10261/392415/1/distribution_modelling_Castro.pdf
• Precaución ante picaduras de medusas: https://www.sanidad.gob.es/areas/sanidadAmbiental/riesgosAmbientales/calorExtremo/publicaciones/docs/precaucionMedusas.pd
• ¿Qué son las salpas y por qué invaden la costa andaluza?: https://www.eltiempo.es/noticias/que-son-las-salpas-y-por-que-invaden-la-costa-andaluza
• Las proliferaciones de medusas: https://www.miteco.gob.es/es/costas/campanas/campana-medusas/proliferaciones.html