DEVOCIÓN

Una Esperanza de Triana en el salón de casa

  • El cofrade Antonio Mesa cumple el sueño de tener una réplica de la Virgen a la que sacó de costalero

Antonio Mesa y Antonio Rivera junto a la réplica de la Virgen de la Esperanza

Antonio Mesa y Antonio Rivera junto a la réplica de la Virgen de la Esperanza / PABLO LASTRUCCI

El salón del cofrade Antonio Mesa, vecino del barrio del Altozano, ya lo preside una pequeña Virgen de la Esperanza de Triana. En la capilla de los Marineros, a 250 metros de su casa, se venera la Virgen de tez morena que llevó sobre su cerviz durante los 26 años que perteneció a su cuadrilla de costaleros, a las órdenes de Juan Borrero, Salvador Dorado 'el penitente', Jesús Basterra y Juan Manuel López.

Hace unos meses, este trianero quedó prendado de una pequeña réplica de su Virgen de la Esperanza, expuesta en los escaparates de la tienda cofrade que regenta Carlos Gavira en la calle Pagés del Corro, próxima al convento de las Mínimas. Lo primero que pensó es que sus nietos pudieran dejarla caer con sus juegos y travesuras. Pasado un tiempo, Antonio no pudo contener más sus ganas y decidió llevársela a casa.

Antonio Mesa, su esposa y nietos junto a la pequeña Virgen de la Esperanza Antonio Mesa, su esposa y nietos junto a la pequeña Virgen de la Esperanza

Antonio Mesa, su esposa y nietos junto a la pequeña Virgen de la Esperanza / PABLO LASTRUCCI

La pequeña Dolorosa, que guarda un notable parecido con la auténtica, ha sido bendecida esta semana en la tienda donde fue venida, para recibir culto privado en su domicilio. Hasta el lugar se desplazó el diácono de la parroquia de Santa Ana, Antonio Rivera, los nietos de Antonio Mesa, su esposa, y demás amigos y familiares. La imagen había sido vestida por José Manuel Jiménez Ortiz, el antiguo vestidor de la Esperanza de Triana, con un terno de color blanco y rosa.

Antonio estaba visiblemente emocionado en el momento de la bendición, pues para él la Virgen de la Esperanza ha ocupado un lugar muy importante en su vida. Recuerda que el primer paso que sacó vestido de costalero era precisamente el de una pequeña 'Esperancita' que procesionaba desde la casa de los Cantero, siendo un niño. Sus ojos brillan cuando se le pregunta por ella. Ahora, gracias a esta pequeña talla, tendrá a su Esperanza más presente en su hogar.

Antonio Mesa y Antonio Rivera junto a la Virgen bendecida Antonio Mesa y Antonio Rivera junto a la Virgen bendecida

Antonio Mesa y Antonio Rivera junto a la Virgen bendecida / PABLO LASTRUCCI

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