Sevilla

Conductores de Tussam denuncian fraudes en el bonobús solidario

  • El Ayuntamiento ha destinado este año 2,5 millones para expedir 9.000 títulos

Niños de cinco años, personas mayores con más de 70 y hasta con un trabajo. Éstos son algunos de los ejemplos que citan los conductores de Tussam para denunciar los fraudes que se están cometiendo con el bonobús solidario, un título que ofrece la empresa municipal a los parados y personas con recursos limitados para que se desplacen gratis en autobús o tranvía, pero que en muchas ocasiones se usa indebidamente ya sea por parte de alguien que no es titular de la tarjeta o por una utilización que no se ajusta a los criterios establecidos. Los trabajadores exigen a la empresa que tome medidas para evitar este tipo de engaño, peticiones que, por ahora, han caído en saco roto. El Ayuntamiento, por su parte, minimiza este problema al asegurar que el fraude en este título se sitúa en un nivel inferior al 2%.

Los conductores han constatado que durante los últimos meses el bonobús solidario se ha convertido en uno de los títulos que se usan con mayor irregularidad por los pasajeros de Tussam. En principio, según establecen las normas de la empresa municipal de transportes, esta tarjeta va dirigida a tres colectivos: personas perceptoras de la renta activa de inserción (RAI) o del subsidio por desempleo, aquéllas que realizan un programa de Andalucía Orienta para la búsqueda de un trabajo y los que lleven un mínimo de un año inscritos en la oficina de empleo o acrediten que sus ingresos familiares se sitúan por debajo de los 720 euros por persona y mes. Sin embargo, son muchas ocasiones en las que los trabajadores de Tussam han tenido que llamar la atención al usuario que ha pretendido realizar un viaje con dicho título sin ser el titular que aparece en la tarjeta -que va acompañada de foto- o no reunir las condiciones detalladas.

Estas advertencias han deparado un buen número de veces discusiones con los pasajeros y una pérdida de tiempo en el trayecto que ha llevado a los empleados a proponer al Departamento de Calidad de la empresa el establecimiento de unas medidas que eviten a los trabajadores convertirse en agentes que velen por el uso correcto de los títulos de viaje. La primera propuesta consiste en la instalación de un sistema que compruebe que la persona que pica corresponde con la foto que acompaña a la tarjeta y que bloquee el proceso en caso de que no fuera así. Según los trabajadores, dicho mecanismo lo usan ya en varias ciudades europeas, entre ellas, Madrid y Barcelona. La empresa ha respondido que a corto plazo esta solicitud no puede ser atendida por motivos económicos.

Los trabajadores han planteado como alternativa que se rescate la figura del revisor que ya existe en el Metrocentro, es decir, la persona encargada de comprobar que los viajeros han utilizado el título debido. Esta propuesta no ha recibo aún contestación. Según los empleados, dicha labor la desempeñaba en el tranvía una empresa externa, pero ahora se han "rescatado" para la inspección a trabajadores de baja en Tussam que no pueden ponerse delante de un volante por diferentes motivos.

Las medidas que han trasladado estos empleados a la dirección de la empresa también atañen a la concesión del bonobús solidario. De esta forma, piden que sea la propia empresa la que se encargue de su tramitación desde que se solicita, y no a través de los distritos, como estableció el actual gobierno de la ciudad para favorecer la "descentralización". También proponen un seguimiento continuo del estado laboral del titular, ya que, según detallan los conductores, han comprobado cómo algunos pasajeros hacen uso del bonobús solidario pese a estar trabajando. "Como su uso se prorroga cada semestre hay quien puede llevarse varios meses favoreciéndose de ella pese a darse de alta en la Seguridad Social al encontrar un empleo", señala uno de los conductores.

Otra de las medidas que piden que se tengan en cuenta es la reducción de la franja horaria de uso y día. "No tiene sentido que haya personas que se suban al autobús con el bonobús solidario para salir por la noche o un fin de semana. Se supone que esta tarjeta debe servir para sufragar los gastos de los parados que se desplazan para buscar un empleo", asegura uno de los trabajadores.

Esta tarjeta fue creada el pasado mandato a instancias del grupo municipal de IU, socio de gobierno con el PSOE. Para este año la expedición del título cuenta con un presupuesto de 2.520.000 euros. Se prevé que a lo largo de 2012 se tramiten casi 9.000 bonobuses solidarios. Las líneas que registran un mayor porcentaje de usuarios de esta tarjeta en relación al número de viajeros son la número 52 (San Bernardo-Palmete), la 31 (Prado de San Sebastián-Polígono Sur) y la 29 (Prado de San Sebastián-Torreblanca).

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios