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Detenido otro policía nacional en una operación contra el narcotráfico

El agente, que trabaja en el Grupo de Tráfico Mediano, fue arrestado ayer por su implicación en una red de tráfico de drogas · El arresto tiene vinculación con la operación en la que cayó un funcionario municipal

El agente Lars Sepúlveda.
Fernando Pérez Ávila

25 de noviembre 2009 - 05:03

La unidad de Asuntos Internos de la Policía Nacional detuvo ayer a un agente de este cuerpo por su presunta colaboración con una banda de narcotraficantes. El detenido es un agente de la escala básica que perteneció hasta hace unas semanas a la unidad de Mediano Tráfico de estupefacientes de Sevilla, un grupo que se dedica principalmente a combatir el menudeo y el tráfico de drogas a pequeña y media escala. Se trata del tercer policía destinado en Sevilla arrestado en dos meses por su vinculación al mundo del narcotráfico, después de que fueran detenidos en septiembre el policía nacional Lars Sepúlveda por presuntamente robar 154 kilos de cocaína y heroína de la Jefatura y, en otra operación distinta, un policía local por su colaboración con una red de narcotraficantes.

Es precisamente en el curso de esta operación en la que fue detenido el agente municipal en la que ha sido ahora arrestado este policía nacional. La Jefatura decidió denunciar ante el juzgado a este agente, identificado como Sergio O., la semana pasada por sus vinculaciones con una organización dedicada al tráfico de hachís a gran escala y ayer finalmente fue detenido. A la hora de cierre de esta edición, el policía permanecía en las dependencias de la Jefatura Superior de la avenida de Blas Infante a la espera de pasar a disposición judicial en las próximas horas. La Policía también registró ayer el domicilio del agente detenido, que se encuentra actualmente de baja y que había sido trasladado a la brigada de Seguridad Ciudadana.

A Sergio O. se le considera colaborador de la red desarticulada el pasado mes de septiembre, cuyo cabecilla tenía un almacén dedicado a la venta de pollos en La Rinconada en el que fueron intervenidos más de 1.000 kilos de hachís. En esa misma operación la Policía sorprendió en el Alamillo al conductor de una furgoneta que viajaba desde Cádiz cargada con otros 500 kilos de la misma droga. Diez personas fueron detenidas en este golpe policial al narcotráfico. Uno de los arrestados fue un policía local de Sevilla, al que se consideraba que había dado trato de favor a los narcotraficantes a través de una serie de multas de tráfico.

La detención del policía nacional se produce dos meses después de que la juez de Instrucción 8, encargada del caso, decretara el ingreso en prisión de los diez detenidos. La banda desmantelada es la misma que el pasado enero trató de introducir 11.000 kilos de hachís en Sevilla, en una maniobra que fue abortada precisamente por el Grupo de Mediano Tráfico de drogas de Sevilla. Esta unidad encontró las 11 toneladas de esta droga en un garaje de Sevilla Este, en lo que constituye el mayor alijo de estupefacientes en la historia de Sevilla. Por esta intervención fueron condecorados el pasado lunes dos policías locales que colaboraron en el operativo.

Los 11.000 kilos intervenidos fueron fruto de cierta polémica porque no había espacio para almacenarlos en la Jefatura y quedaron durante meses depositados en dos camiones junto a la puerta de las instalaciones policiales de Blas Infante, justo unos meses después de que se conociera la desaparición de 154 kilos de cocaína y heroína que se guardaban en unos calabozos inutilizados de la propia Jefatura.

Según explicaron ayer a este periódico fuentes del caso, el policía detenido podría tener una relación habitual con los miembros de la banda desmantelada en septiembre e incluso conocería desde su juventud a algunos de los detenidos. Esta vinculación podría haber desembocado en que el agente pasara información a los narcotraficantes, algo que está investigando la unidad de Asuntos Internos de Sevilla. La banda con la que se relaciona a este agente introducía hachís desde Cádiz y Huelva y en ella cayeron los dueños de un gimnasio de Montequinto en el que la Policía se incautó de una serie de sustancias anabolizantes.

Además del policía detenido, durante la tarde de ayer también estuvo declarando ante el grupo encargado de la investigación uno de los responsables policiales, que estuvo dando explicaciones sobre el comportamiento de su subordinado.

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