Gómez de Celis figura como socio en la caseta de Mir desde 2007

El delegado de Presidencia y Urbanismo del Ayuntamiento de Sevilla y portavoz del grupo municipal socialista, Alfonso Rodríguez Gómez de Celis, admitió ayer a este periódico que desde el año 2007 paga cuota en la caseta de feria Los Mimogas, de cuya titularidad se apropió el actual concejal de Convivencia y Seguridad, Alfonso Mir, tras un "error técnico" de un funcionario en 2006. Fue entonces cuando debido a la solicitud de un traslado se cambió la consideración de la caseta, pasando de entidad a familiar compartida, según concluye la investigación realizada en la Delegación municipal de Fiestas Mayores por su titular, Rosamar Prieto.

Mir aprovechó el fallo para, en 2007, rebautizar la caseta con el nombre de Los Mimogas y registrar de cotitulares a sus dos hijos. Ese mismo año ofreció el pago de la cuota a su compañero de partido Gómez de Celis para el disfrute de la caseta, lo que viene haciendo desde entonces. Celis admitió ayer que ingresó como socio invitado por Mir, al igual que otras personas, y que no vio indicio alguno de irregularidad en la titularidad de la caseta.

La caseta de Mir todavía reza en los expedientes municipales como de Mantenimiento de Servicios Municipales. Fue solicitada en 1988 por la sección sindical de limpieza de escuelas de UGT, de la que Mir era secretario sindical. Años más tarde, siendo gerente de Lipasam, aprovecha el error técnico en el cambio de consideración para quedársela, según se desprende de la investigación realizada por el propio Ayuntamiento. No obstante, él mismo ha argumentado que la caseta era "privada y mía". En concreto, el edil ha asegurado esta semana que la caseta fue solicitada por él como privada y no como entidad y que la puso después a disposición de los trabajadores.

En este sentido, el propio Gómez de Celis ha venido admitiendo en los últimos días, desde que saltó la polémica, que la caseta de Mir "nunca fue de titularidad municipal" y que Mir pagaba anualmente las tasas de su bolsillo sin prorratearla entre los socios. En esta línea, la portavoz del gobierno local, la también socialista Maribel Montaño, aseguró que "habría que darle las gracias a Mir por haber puesto la caseta a disposición de los trabajadores".

Pero para la oposición, estas explicaciones son insuficientes y demuestran, según los representantes del PP, "que Mir miente y que estamos ante un mangazo de quien entonces se valió de su condición de gerente de Lipasam para quedarse con la caseta de los trabajadores municipales".

La lista de espera de casetas la conforman 1.300 personas como representantes de peñas, familias y entidades, lo que ha avivado la polémica tras conocerse que Mir pudo cometer una irregularidad.