Sando optaba al futuro Merca 4 meses antes del concurso
La juez retoma hoy la instrucción con la declaración de uno de los representantes de esta empresa
Cuatro meses antes de que se le adjudicara el concurso público para la venta de los terrenos de Mercasevilla, la constructora malagueña Sando se perfilaba como la empresa a la que se encargaría la edificación de las nuevas instalaciones en Majarabique, una operación que aparecía vinculada a la subrogación de un contrato que la sociedad mixta tenía con la inmobiliaria Larena 98 para ampliación de sus instalaciones.
La comisión ejecutiva de Mercasevilla abordó el 8 de noviembre de 2005 la posibilidad de sacar a concurso el derecho de opción de compra de los terrenos del mercado mayorista y el 30 de noviembre de 2005 el consejo de Administración y la Junta General de Accionistas acordaron que se realizara un concurso público. La comisión ejecutiva de Sando, en una reunión del 15 de febrero de 2006, aprobó adjudicar este concurso a la constructora Sando y en el pliego de condiciones se incluía que el contrato permitía la participación del ganador en el desarrollo de las actuaciones urbanísticas necesarias para culminar el traslado a Majarabique. Sin embargo, cuatro meses antes de que Sando se adjudicara el concurso y, por tanto, la posibilidad de participar en esa operación futura en las nuevas instalaciones del mercado central, ya se comentaba en el entorno próximo a Mercasevilla que sería esta empresa la que construiría las futuras instalaciones.
Una información publicada por este periódico el 19 de octubre de 2005 ya apuntaba que "Sando podría construir el nuevo mercado central" en los suelos de Majarabique, una operación que aparecía como una "compensación" al contrato que había asumido con Mercasevilla tras la renuncia de la inmobiliaria Larena 98 a ampliar las actuales instalaciones. En los ambientes próximos a Mercasevilla siempre se habló de esa "compensación" como algo natural. Sando adquirió a esta empresa un derecho de superficie sobre diversas parcelas de Mercasevilla, por las que se pagó 1.890.000 euros, y a cambio, comenzó a pagar desde 2005 un canon de arrendamiento mensual de 58.738 euros.
La juez de Instrucción número 6 de Sevilla, Mercedes Alaya, que investiga el caso, considera que la adjudicación a Sando del concurso de los terrenos fue "ilegal" y "fraudulenta" porque se introdujeron varias cláusulas -la del alza temeraria y la de titularidad previa de los terrenos- que favorecieron "claramente" a Sando. La juez retomará hoy la instrucción del caso con la declaración de Luis Sánchez Manzano, vicepresidente de Sando.
No hay comentarios