Una forma diferente de entender el arte

Desde hace 20 años está vinculado al mundo del arte y ahora ha decidido dar un paso más haciéndolo más accesible para todos. Fernando Rodríguez Moreno nació en Sevilla hace 50 años y está al frente de un taller de enmarcación en el polígono Calonge que, desde hoy mismo, es también una galería de arte. Art Factory es el nombre que ha elegido para esta iniciativa "que ya triunfa en otras ciudades como Madrid" pero que en Sevilla es toda una novedad y que aúna en un mismo espacio un taller artesanal y 150 metros cuadrados destinados a albergar obras de pintores y escultores de distintos estilos. Su objetivo, cuenta, es "democratizar" de alguna manera el arte ya que "a la mayoría de la gente le da pudor ir a una galería aunque luego quieran comprar algún cuadro". Con 18 años empezó a trabajar como representante de molduras para cuadros, una tarea que le ha llevado a recorrer todo el país y parte del extranjero. Ha organizado ferias, ha dirigido varias galerías y es coleccionista, marchante y, sobre todo, un apasionado de la pintura. Puede que sea porque lo lleva "muy en la sangre", ya que es bisnieto del pintor sevillano Fernando Tirado. Aunque le cuesta reconocerlo, confiesa que "pintar, pinto" pero asegura que le "falta tiempo" para dedicarse a la pintura, sobre la que procura formarse. La obra impresionista de Manolo Campaña cuelga ya de las paredes de su taller, nueva parada obligada para los amantes del arte en la ciudad.