El importe de las becas de Educación cae hasta los niveles de 2009
El régimen de ayudas implantado en 2012 recorta en 800 euros la cantidad que reciben los becados de la Hispalense.
Más beneficiarios pero menos importe económico. Tras la implantación en 2012 del nuevo régimen de ayudas del Ministerio de Educación, el número de becas concedidas se ha incrementado más de cinco puntos porcentuales. Sin embargo, el importe de las becas ha caído hasta un 21% en el caso de los estudiantes de la Universidad de Sevilla, retrocediendo a los niveles del curso 2009-2010.
El pasado año, 28.265 alumnos de la Hispalense solicitaron la beca del Ministerio de Educación, Cultura y Deporte (MECD), que le fue concedida finalmente a 16.543 alumnos. En total, el Gobierno central destinó a este fin 46.047.442 euros, un 21% menos que en 2012, antes de la implantación del nuevo régimen de ayudas, según datos facilitados por la Universidad de Sevilla. De este modo, los beneficiarios del curso 2011-2012 recibieron un promedio de 3.570 euros en ayudas, mientras que el pasado curso el importe fue de 2.783 euros. A pesar de estos datos negativos, el año pasado supuso un cierto alivio, ya que el presupuesto fue un 2,8% superior al del curso 2013-2014.
Hasta el curso 2011-2012, los universitarios que estudiaban fuera del domicilio y procedían de familias con escasos recursos podían optar a ayudas por movilidad por un importe máximo de 3.000 euros y por renta (también por un máximo de 3.000 euros). Ahora, el nuevo sistema comprende una parte fija y otra variable. La cuantía fija está ligada a la renta y a la necesidad del estudiante de cambiar de residencia para acudir a la universidad. Los alumnos que cumplan los requisitos académicos (entre un 65% y un 90% de los créditos aprobados, según la carrera, y entre un 6 y un 6,5 de media) y económicos (ingresos globales entre 38.000 y 14.000 euros para una familia de cuatro miembros, según el tipo de beca) podrán lograr por cada uno de estos conceptos una ayuda de 1.500 euros.
La cuantía variable se establece una vez asignados los importes fijos. El dinero sobrante se distribuye entre los alumnos de enseñanzas medias y universidad según la renta familiar, la nota media del solicitante, la nota media de los becarios que acceden a estas ayudas por área de conocimiento y el número total de beneficiarios.
"Con este nuevo sistema, hay más número de becados, pero el dinero que recibe cada alumno ha bajado considerablemente", apunta Antonio Herrera, vicerrector de Estudiantes de la Universidad Pablo de Olavide. En este caso, el importe global de las matrículas becadas por el Ministerio de Educación el curso pasado fue de 2.706.416 euros, beneficiando a 3.450 alumnos de la UPO, el 68% de los estudiantes que la solicitaron.
Herrera reconoce que el número de universitarios que no reciben la beca MECD y que no pueden hacer frente al pago de la matrícula ha crecido en los últimos años. La institución académica no cuenta actualmente con datos concretos, pero confirma que se está llevando a cabo un diagnóstico de la situación que permita "abordar con mayor seguridad esta problemática", según apuntan fuentes de la UPO.
Ante esta situación, esta Universidad puso en marcha el pasado año un Fondo de Solidaridad para apoyar a estudiantes con problemas económicos sobrevenidos, del que se beneficiaron 29 estudiantes. A esta cifra hay que sumar otros 22 que recibieron apoyo de las ayudas de la Obra Social La Caixa, la Fundación Persán y Cáritas Universitaria, además de los bonos de comedor, alojamiento, material y precios públicos de matrícula. Este curso, la UPO prevé incrementar este tipo de ayudas en más de un 50%, según señalan desde la institución. "El esfuerzo extra que las universidades realizan para ayudar a sus estudiantes es titánico", señala el vicerrector de Estudiantes de la UPO.
Herrera confirma que en años anteriores ya existían ayudas por parte de la Olavide que complementaban las del Gobierno y la Junta, pero "eran puntuales". "La situación se ha agravado y cada vez son más los alumnos que no cumplen los requisitos para la beca del Ministerio, que se basan en la renta del año anterior, pero que no pueden hacer frente a la matrícula a causa de un problema sobrevenido", señala Antonio Herrera.
En el caso de la Universidad de Sevilla, 6.224 alumnos solicitaron una beca propia de esta institución (matrícula, residencia, desplazamiento y material) el pasado curso. Finalmente se convocaron 2.122 ayudas con una dotación de 1.067.756 euros. A esta cifra, según apuntan desde la Hispalense, hay que sumar las ayudas de comedor y formación, superando los 3 millones de euros.
El número de estudiantes Erasmus también se ha visto afectado por la crisis. El pasado curso, 844 alumnos de la Universidad de Sevilla se beneficiaron de esta beca frente a los 1.605 alumnos del curso 2012-2013, cuando se registró la cifra más alta de la última década. Este año se ha produce un leve incremento, con 982 estudiantes becados. En la Universidad Pablo de Olavide, la situación es similar. Este curso estudiarán fuera de Sevilla 456 alumnos frente a los 476 del año pasado o los 590 del curso 2012-2013.
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