El año 2022 ha arrancado de la peor manera posible en las carreteras de la provincia de Sevilla, con una cifra de muertos que recuerda a otros tiempos en los que la mortalidad de los accidentes de tráfico era mucho mayor. En el primer mes y medio del año, han perdido la vida 14 personas en siniestros ocurridos en vías interurbanas. Son más de una tercera parte de todas las víctimas mortales registradas el año pasado, que se cerró con 33 fallecidos. 

De seguir por la tendencia actual, este 2022 acabaría con una cifra de muertos que superaría el centenar, un dato que no se alcanza en Sevilla desde el año 2007, que terminó con 108 víctimas mortales. Puede hablarse, por tanto, del peor inicio de año en cuanto al tráfico de los últimos 15 años. A los 14 fallecidos de 2022 hay que añadirle al menos otros cuatro que perdieron la vida en accidentes en Sevilla capital. Al tratarse de un siniestros en ciudad, no figura en las estadísticas de siniestralidad en vías interurbanas.

Este elevado número de muertos en el primer mes y medio del año se explica por la coincidencia de varios accidentes con más de una víctima. Hasta en cinco ocasiones se han registrado siniestros en los que han perdido la vida dos personas en cada uno. El último de ellos ocurrió el pasado lunes, 14 de febrero, a las dos y cuarto de la tarde en Sanlúcar la Mayor. Una chica de 19 años y su novio de 22 murieron al chocar el coche en el que iban contra un autobús en la A-472, a la altura del cruce con Aznalcóllar. Las dos víctimas eran vecinos de esta localidad.

Una ambulancia del 061, en el lugar del accidente en el que murió un ciclista en Bollullos.

Dos días antes, el sábado 12 de febrero, hubo otro accidente en Osuna, donde murieron dos jóvenes de 29 años. El siniestro se produjo a las nueve y media de la mañana, al salirse de la carretera el coche en el que viajaban, en el kilómetro 76 de la A-92, en sentido Sevilla. Los Bomberos tuvieron que excarcelar los cuerpos, que habían quedado atrapados entre los restos del coche.

El anterior accidente con dos víctimas sucedió el 30 de enero, domingo, en la carretera A-460, en el kilómetro 11, en el término municipal de Alcalá del Río. En el siniestro murieron dos personas, un joven de 24 años y un hombre de 41. Los dos eran vecinos de Castilblanco de los Arroyos. Fue una salida de vía. El accidente se produjo de madrugada, si bien nadie vio el coche accidentado hasta las siete de la mañana. El conductor había muerto en el acto y el copiloto fue trasladado en estado muy grave al hospital, donde murió horas después. Una de las víctimas era un conocido DJ de la zona, que regresaba del trabajo.

El vehículo accidentado en Alcalá del Río, completamente destrozado tras salirse de la vía.

El domingo anterior, el 23 de enero, murieron otras dos personas en un accidente en la carretera A-457, que une Lora del Río y Carmona. El accidente fue un choque frontal entre dos turimos, que tuvo lugar en el kilómetro 21 de la citada vía, en el término de Lora. En esta ocasión el siniestro fue a las cinco y media de la tarde. Murieron un hombre y una mujer y hubo tres heridos, dos de ellos graves. Uno de los fallecidos perdió la vida en el acto y otro en el hospital. El alcalde de Lora, Antonio Enamorado, alertó del elevado volumen de tráfico que soporta esta carretera durante los fines de semana, pues es una de las vías más utilizadas para ir y volver de la Sierra Norte.

El primero de los siniestros con dos fallecidos fue el miércoles 12 de enero en la carretera A-8026, que conecta Sevilla y Mairena del Alcor. Se produjo en el kilómetro 7, a la altura del término municipal de Alcalá de Guadaíra, a la espalda de una zona de polígonos industriales. Fue también un choque frontal en el que falleció una persona de cada coche.

A estos cinco accidentes hay que sumar otros cuatro en los que hubo una víctima mortal en cada uno. El primero sucedió también en Alcalá de Guadaíra, aunque en la autovía A-92 a la altura de la cementera. Fue un atropello a un peatón, que cruzaba la vía de manera indebida, a las once y media de la noche del domingo 9 de enero.

El miércoles 2 de febrero, murió un ciclista y otro resultó herido grave en la SE-3306, en Bollullos de la Mitación en sentido Benacazón. El deportista fue arrollado por un camión frigorífico, que los desplazó a la cuneta. Tanto la víctima mortal como el herido son vecinos de Coria del Río. 

Otro accidente mortal registrado en lo que va de año en la provincia de Sevilla se produjo el pasado domingo, 13 de febrero, en Lebrija. Un joven de 21 años perdió la vida en una salida de vía ocurrida a las siete y media de la mañana en la carretera A-471, a la altura del kilómetro 28. Ese mismo fin de semana hubo otro accidente con cuatro heridos en Paradas.

El último de los accidentes mortales fue el pasado jueves 17 de febrero en Sanlúcar la Mayor, en la carretera A-8056, a la altura de la urbanización ElCapricho. En este siniestro murió un hombre al colisionar su vehículo frontalmente contra un autobús.

Bomberos y sanitarios trabajan en un accidente con dos muertos en Alcalá de Guadaíra.

Cinco de los nueve siniestros con víctimas mortales de este inicio de año ocurrieron en fin de semana, dos en miércoles, uno en lunes y el último en jueves. De los cinco del fin de semana, dos tuvieron lugar en sábado y tres en domingo. La mayoría de ellos fue de madrugada o a primera hora de la mañana. Sólo hubo uno por la tarde, el de Lora del Río. Los ocurridos en días laborables fueron a mediodía y a primera hora de la tarde.

Tres de los accidentes fueron salidas de vía con sólo un vehículo implicado, tres consistieron en choques frontales (dos entre dos turismos y otro en un autobús y un coche), otro fue una colisión frontolateral entre un autobús y un turismo, y hubo dos atropellos, uno a un peatón y otro a un ciclista. La mayoría de las víctimas mortales fueron hombres jóvenes.

De los 14 muertos, sólo tres se dejaron la vida en autovías. De hecho, los tres murieron en la misma autovía, la A-92, en dos accidentes distintos, el atropello de Alcalá de Guadaíra y la salida de vía de Osuna. No hubo ningún accidente mortal en la A-49 o la AP-4, algunas de las vías más utilizadas por los sevillanos. Tampoco lo hubo en la SE-30, donde el último siniestro mortal se produjo el 27 de diciembre de 2021, en e cruce de la Gota de Leche, en la incorporación hacia la A-4 en sentido Sevilla.

El resto de víctimas murieron en carreteras de la red autonómica, salvo el ciclista de Bollullos, cuyo atropello se produjo en una carretera de la Diputación Provincial de Sevilla. Alcalá de Guadaíra y Sanlúcar la Mayor, con tres víctimas mortales, son los municipios que llevan más fallecidos en este mes y medio. Alcalá del Río, Lora del Río,  Osuna y Sanlúcar la Mayor le siguen con dos; y Lebrija y Bollullos con uno.

Un policía local de Sevilla trabaja en la investigación del accidente en el que murió un peatón en la Ronda de Capuchinos.

Con estos 14 fallecidos se ha superado ya la tercera parte de los muertos en carretera registrados el año pasado, que fueron 33 a lo largo de todo 2021. Sólo hubo tres accidentes con más de una víctima mortal, mientras que en lo que va de año ya ha habido cuatro.

Durante el año pasado se registraron varios accidentes con motoristas fallecidos. En este inicio de 2022 murió un motorista en la SE-30, pero figura dentro de los accidentes en casco urbano. 12 de los 14 fallecidos iban en coche. Los otros dos son un ciclista y un peatón. Nueve de los once fallecidos iban en coche. Los otros dos son un ciclista y un peatón.

Hubo años todavía mejores que el pasado. De los últimos, el que menos víctimas mortales hubo fue 2020, con 31 muertos. Evidentemente, las estadísticas de ese año estuvieron condicionadas por la pandemia del coronavirus y los meses de estricto confinamiento, las restricciones de movilidad y los toques de queda, que redujeron mucho la movilidad en las carreteras. 

En 2019, último año prepandemia, hubo 44 fallecidos. La pandemia marcó un punto de inflexión de la tendencia, pues se venía de una serie al alza, siempre dentro de unos datos bastante moderados. Así, en 2017 murieron 35 personas y en 2018 fueron 39 las que se dejaron la vida en el asfalto. Años atrás se obtuvieron todavía mejores cifras. El dato más bajo es de 2015, que terminó con sólo 25 fallecidos.