Tras el aumento de casos registrado por una celebración de la Feria de Abril con alta transmisión, el Covid-19 empieza a remitir en la provincia y, sobre todo, en la capital sevillana. Así lo confirman los últimos datos aportados por las autoridades sanitarias andaluzas, que avisan de que el virus sigue presente en nuestro día a día, aunque en forma de "dientes de sierra", por lo que se empieza a apreciar una pérdida de su influencia social.

Según los últimos indices de incidencia comunicados el viernes pasado por la Consejería de Salud y Familias, la tasa de contagio actual en Sevilla capital, sólo teniendo en cuenta el impacto de la enfermedad en mayores de 60 años, inmunodeprimidos y embarazadas, se encuentra actualmente en 583,2 casos por cada 100.000 habitantes tras superar el millar la semana anterior. En la provincia también se mantiene esa tendencia descendente, con una incidencia inferior a los 500 casos (463). Por su parte, la situación en los hospitales sigue estable, con una notable caída en el número de ingresos en el último balance oficial, por debajo de los 200 por primera vez tras el repunte tras la Feria, hasta llegar a los 191 pacientes tras un importante descenso de 25 personas menos en tres jornadas.

Pero hay más. La evolución positiva de esta nueva etapa de la pandemia y la tendencia hacia la estabilidad de la séptima ola también se apoya en los análisis que cada semana se realiza de las aguas residuales. Un indicador que recoge la presencia del virus en un total de cinco estaciones depuradoras distribuidas por distintas zonas de la provincia y que cobra mayor importancia en esta nueva normalidad en la que el sistema de vigilancia epidemiológica nacional se centra en monitorear a los mayores de 60 años y otras personas vulnerables.

Aunque aún no se cuenta con datos de la semana pasada, la actualización del último periodo estudiado, correspondiente a la semana del 16 al 22 de mayo, ya constata un descenso paulatino de la presencia del virus, sobre todo, en aquellas estaciones en las que siete días antes, es decir, justo la semana de después de la celebración de la Feria, se recogía una situación de aumento significativo. 

Así, los registros apuntan a una situación en disminución, con la la existencia de 1,8 millones de copias genómicas por litro (cg/l), la correspondiente a la estación del Copero, que depura las aguas de la cuenca sur de Sevilla, la población de Dos Hermanas y el polígono industrial La Isla. Un dato bastante alejado de los 4,7 millones contabilizados siete días antes. La misma catalogación recibe la EDAR San Jerónimo (zona norte de Sevilla, las de la Isla de la Cartuja y las procedentes de los núcleos poblacionales de La Rinconada, San José de la Rinconada y Alcalá del Río), donde, según el mismo análisis, se ha pasado en una semana de las 3,5 millones de cg/l a las 550.000. Esto es un 0,41% y un 0,80% menos, respectivamente. También ha sido catalogada en disminución la presencia del virus en las aguas residuales de la estación depuradora Mairena-El Viso, con un descenso del 0,65%, hasta las 760.000 cg/l frente a las 3,4 millones de la semana anterior.

Por su parte, la presencia de SARS-CoV-2 se mantiene estable en las aguas que depuran las estaciones de la EDAR la Ranilla (que depura aguas residuales de la zona este de Sevilla y las de Alcalá de Guadaíra) y Tablada (zona oeste de Sevilla y municipios de Camas y San Juan de Aznalfarache), con la localización de 910.000 y 83.000 copias genómicas del virus, respectivamente.

El análisis de las muestras de aguas residuales mide en copias genómicas el SARS-CoV-2 por litro (cg/l) y se transforman a escala logarítmica (log10 cg/l) para ofrecer los resultados. Y, así, las variaciones de la presencia del Covid en las aguas residuales se traducen en su evolución en distintas franjas: aumento significativo si es más de +1 unidad logarítmica, aumento si es entre +0,4 y +1, estable si es entre -0,4 y +0,4, disminución si es entre -0,4 y -1 y disminución significativa si hay una bajada de más de -1.

De acuerdo con los especialistas, este sistema es una herramienta sensible, incluso cuando la prevalencia de Covid presenta niveles bajos en la población. Consiste en el análisis semanal las muestras que se recogen a través de cinco depuradoras urbanas en la provincia, por lo que sirve como alerta temprana de brotes en zonas concretas.