La falta de lluvias durante los últimos años ha llevado a Sevilla y su área metropolitana a una situación de emergencia por sequía con amenaza de restricciones para este verano, pese a la enorme reducción de gasto diario de agua que el territorio ha logrado en las últimas tres décadas.

La conciencia ciudadana sobre la necesidad de ahorrar agua se ha implantado de lleno en Sevilla desde que los sevillanos sufrimos los cortes de suministro entre 1992 y 1995. El ahorro ha sido tal que los sevillanos han logrado consumir 71 litros menos de agua a diario que hace tres décadas. Hablamos de la población de la docena de municipios a los que abastece donde habitan 1.100.000 de personas. 

Los datos de Emasesa (Empresa Metropolitana de Aguas de Sevilla) indican que, antes de la gran sequía que derivó en fuertes restricciones de agua, los sevillanos gastaban a diario una media de 176 litros de agua, mientras en la actualidad ese consumo ha descendido hasta los 105 litros al día. Según Emasesa, este cómputo incluye todos los usos, también las plazas hoteleras de la ciudad, que gastan el triple de agua que los domicilios. 

La empresa de aguas atribuye esa gran reducción del consumo diario de agua por habitante a cuatro factores: "las campañas de concienciación, las inversiones, la reducción de fugas y la colaboración del conjunto de la ciudadanía".

Evolución del consumo de agua en Sevilla

El reto de la empresa de aguas es rebajar el consumo a 90 litros por habitante y día, un objetivo posible si tenemos en cuenta el descenso paulatino y constante de las últimas décadas. 

Una parte importante de la población abastecida por Emasesa no solo cumple con creces ese objetivo, sino que gasta menos. Es el caso del grupo de los grandes ahorradores que consumen menos de 90 litros al día y suponen más de la mitad de la población de los municipios que abastece Emasesa. En cifras, esos grandes economizadores suman 650.000 personas, según la empresa.   

Sevilla y su área metropolitana se sitúan en la cuenca del Guadalquivir, una de las grandes afectadas por la extrema sequía junto con la cuenca de Cataluña.

En la cuenca de Cataluña, más de 200 municipios de Barcelona y Girona también han entrado en emergencia por sequía. A partir de ahora la dotación de agua a estos municipios se reducirá a 200 litros por persona y día "para todos los usos (comercial, industrial, lúdico o doméstico)".  

Menos presión, la primera medida 

Treinta años después de los severos cortes de agua que sufrió Sevilla, volvemos a la situación de Emergencia por Sequía en las 43 poblaciones abastecidas por Emasesa y Aljarafesa. Ante la falta de lluvias en lo que va de año hidrológico (desde octubre), la pesadilla de los cortes de agua amenaza de nuevo a los habitantes de Sevilla y a las capitales de Málaga y Córdoba.

Por ahora el plan es reducir la presión de agua "no antes del verano". como medida aprobada y contemplada en el Plan de Emergencia por Sequía de Emasesa (autorizado por la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir).

La horquilla de reducción de presiones será entre 0,5 y 2 (metros de columna de agua), e inicialmente se realizará en horario de 24:00 a 6:00 horas, volviendo al actual régimen de presiones entre las 6:00 a 24:00 horas.

"Tiene que llover intensamente a lo largo de 30 días seguidos para que podamos llegar al verano" con normalidad, recordó la semana pasada el presidente andaluz Juanma Moreno.

Si se desaprovecha la oportunidad de acometer actuaciones inmediatas, "ciudades como Sevilla, Málaga y Córdoba vivirán restricciones sin ninguna duda", aseguró Moreno, quien recordó que "noviembre y diciembre fueron malos meses, enero también lo está siendo, con lo que ponemos nuestras esperanzas en marzo y abril para poder revertir esta situación".

El Consejo de Gobierno de la Junta aprobó el lunes 29 enero el cuarto decreto-ley de medidas contra la sequía dotado con 200 millones de euros. De ese montante, 50 millones se destinarán a medidas de ayuda al sector agroalimentario, además de contemplar actuaciones para municipios con problemas de abastecimiento. La estación de tratamiento de agua potable (ETAP) de Lora del Río será una de las beneficiadas por este decreto. 

Nivel de embalses

El año hidrológico 2023-2024 ha aportado escasas precipitaciones. La aportación de agua a los embalses que abastecen a Sevilla y su área fue apenas de 45 hm3 que dan para cuatro meses más. Así lo especificó la semana pasada el delegado de Urbanismo y Medio Ambiente y consejero de Emasesa, Juan de la Rosa, quien añadió que estas últimas lluvias "no logran sacarnos de la situación de emergencia por escasez", por lo que la empresa de aguas continúa con la planificación prevista. 

Desde la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir, dependiente del Ministerio de Transición Ecológica, se asegura, sin embargo, que las medidas que se han tomado garantizan agua en toda la cuenca para tres años más. 

A 1 de febrero de 2024, los embalses que abastecen a los municipios sevillanos de Emasesa y Aljarafesa se hallan al 39,5% de su capacidad, con un volumen de agua embalsada de 253,73 hm3. Esta cifra está lejos de los 434 hm3 que tendrían que acumular los embalses para que la situación se normalice.

Las presas de Aracena y Zufre son las que sufren más la escasez. Aracena está al 31,1% de su capacidad y su volumen embalsado es de 40,04 hm3. Zufre se halla al 19,2% con un volumen embalsado de 33,61 hm3.

Los embalses en mejor situación son Minilla, al 60,7%, con un volumen embalsado de 35,09 hm3. El Gergal, al 78,5%, con un volumen embalsado de 27,51 hm3.

Melonares se halla al 48,3% con un volumen embalsado de 89,7 hm3 y Cala, al 47,2% con un volumen embalsado de 27,78 hm3.