Los vecinos de Bami presentan 700 alegaciones en defensa de la zona azul
La asociación del barrio defiende que la implantación de aparcamientos regulados ahuyentó a las "mafias de 'gorrillas".
La asociación de vecinos Bami Unido presentó este miércoles al Ayuntamiento 700 alegaciones y 400 firmas en defensa de la zona azul en su barrio. La presidenta de la sede vecinal, Ana Ojeda, defendió que la implantación de los aparcamientos regulados en 2014 solventó el problema de los "gorrillas agresivos" y facilitó el aparcamiento de los residentes acreditados". Bami Unido esperará hasta finales de semana para tener una respuesta por parte del Consistorio. "De lo contrario, nos volveremos a reunir para ver cómo nos podemos movilizar", aseveró Ojeda.
Los vecinos de la zona anunciaron que no se van a quedar de brazos cruzados si el gobierno municipal no concede sus principales demandas: "Tener un barrio tranquilo y no volver a la saturación y a la contaminación de los años anteriores". Hasta que los miembros de la asociación se vuelvan a reunir, los residentes en Bami seguirán recogiendo firmas para evitar que se derogen los estacionamientos regulados anunciados en el decreto firmado por el delegado de Seguridad, Movilidad y Fiestas Mayores, Juan Carlos Cabrera.
Tras los diferentes intentos por aliviar la saturación de coches y mejorar la seguridad en el barrio, para los afectados el único que ha funcionado fue la puesta en marcha de la zona azul. La representante de la sede vecinal explicó que el problema de los aparcacoches ilegales ha empeorado y que en la actualidad se organizan en "mafias": "Hace unos años, los gorrillas que había por esta zona eran inofensivos, pero los de ahora amenazan a los vecinos cuando éstos se niegan a darles dinero". Ojeda aseguró que los residentes quieren que a la zona donde viven se le conozca como Bami y no como "el barrio de los gorrillas".
La regulación tarifaria implantada en 2014 ha propiciado a los residentes debidamente acreditados, según destacaron desde la asociación, facilidades para estacionar. "Sin esta medida tenemos que dar veinte vueltas para aparcar e irnos a buscar estacionamiento a la zona de Reina Mercedes", denunció Ojeda y añadió que a los vecinos les gustaría que la zona azul se extendiera incluso a los fines de semana.
El anuncio de la intención de derogar la ampliación de la zona azul suscitó una intensa polémica en Bami. Frente a los vecinos del barrio, los comerciantes, los trabajadores del Virgen del Rocío y los estudiantes apoyan la retirada de las plazas.
Una de las portavoces de la plataforma que defiende la supresión de los aparcamientos regulados explicó este miércoles que el viernes entregarán un documento con "sugerencias" en el que solicitarán información sobre el futuro uso del aparcamiento subterráneo de la plaza Rafael Salgado.
Ojeda lamentó que los vecinos son los únicos a los que no se les da ninguna solución. "Los estudiantes tienen tarjetas con descuento para utilizar el transporte público y cuentan con diferentes facilidades para llegar a los campus universitarios", explicó la presidenta de Bami Unido.
"Lo único que queremos es tranquilidad y poder sacar a pasear a nuestros hijos o nietos", subrayó la vecina de Bami, quien sostuvo que su barrio es "muy pequeño" y que no debe estar tan contaminado. Ojeda aseguró que con la zona azul también se han evitado los estacionamientos en doble fila que solían congestionar las calles.
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