El Sevilla cumple su tercer día en el Algorfa, Alicante, y Fernando Navarro, el adjunto a la dirección deportiva y enlace con la plantilla, ha querido hacer un primer balance de cómo funcionan las cosas y de las aspiraciones del equipo en esta tercera temporada con la base construida entre Monchi y Julen Lopetegui. El segundo de a bordo del director general deportivo lo tiene claro, hay que dar otro pasito sobre esa base.

"Contar con la presencia de Julen y una gran base de jugadores que llevan ya tres años trabajando con él te hace tener una idea consolidada y una manera de entrenar muy importante. El sinónimo de continuidad es bueno para todos. Tanto el míster como el equipo han hecho dos temporadas fantásticas. Este año esperamos poder igualarlas y mejorarlas", explicó ante SFC Radio Fernando Navarro, máximo representante del club en la La Finca Resort.

En ese sentido, abundó en estos términos de ese crecimiento continuado al que aspira el Sevilla, aun con los inconvenientes de un mercado varado por la crisis. "Aspiramos a lo máximo, a hacer todo siempre lo mejor posible. Sabemos de la exigencia que tenemos. Son momentos para asimilar y trabajar bien porque luego prácticamente no se puede entrenar".

El ex capitán sevillista le da mucha importancia al proceso de pretemporada, como es habitual en los hombres de fútbol. "Se empieza a cimentar lo que va a ser el año, la temporada es exigente. Se trata de acumular y asimilar conceptos. Tenemos la suerte de que haya un grupo muy hecho en el que nos conocemos todos. Es momento de trabajar y cargar pilas", expuso.

Además, este año el Sevilla cuenta con la ventaja del tiempo, que no tuvo el año pasado por la pandemia y sus éxitos deportivos. Y es otra ventaja a aprovechar: "Son momentos de cohesionar más el grupo, de compartir momentos y comidas, de hacer equipo. Estas semanas de convivencia vienen bien para todo, no solo para lo físico y lo técnico, sino también para lo humano, para que se conozcan mejor entre ellos".  Uno de los acentos que puso Fernando Navarro es cómo han llegado los futbolistas, más predispuestos físicamente ahora que antes a empezar a trabajar por los planes con los que se van de vacaciones. "Con el paso de los años ha cambiado la filosofía del jugador, vienen prácticamente listos para competir. Es una alegría ver el estado físico y las ganas con las que han llegado. Estamos muy contentos por la predisposición y la ilusión con la que han llegado todos", destacó.

Y recordó cómo han cambiado las pretemporadas con el paso de los años, en cuanto a las formas de preparación física: "Ahora se hacen tareas más integradas con el físico, antes se separaban las dos cosas. Se agradece cuando eres jugador que te engañen con la presencia del balón".