Caparrós, aún con deberes

Gonalons, oficio para la medular del Sevilla

  • El Sevilla da un pequeño giro en la planificación al fichar al medio francés, con amplia trayectoria europea

  • Renovar a Sarabia, nuevo foco de incertidumbre entre una afición nerviosa con la planificación 

Gonalons, con en N'Zonzi, en el Sevilla-Lyon de Champions

Gonalons, con en N'Zonzi, en el Sevilla-Lyon de Champions / José Manuel Vidal / EFE

Gonalons hace las maletas para desembarcar en el Sevilla, cuya planificación está resultando un constante foco de debate entre la afición nervionense. Aun así, el club de Nervión está a punto de concretar un fichaje al que aspiró más de una vez Monchi. El traspaso de N’Zonzi a la Roma por un montante global, incluyendo pluses, que superará los 30 millones de euros ha dado un giro a las gestiones para el mediocampo. Maxime Gonalons es un medio francés de 29 años, con amplia experiencia europea gracias a su dilatada trayectoria en el Olympique de Lyon, y es el elegido para suplir al francés. Llegará cedido con opción de compra, tal y como adelantó este diario.

Es un futbolista diferente a Gabriel Pires, que tiene más llegada, pero más problemas para guardar la posición. En esto sí está mucho más especializado el medio centro francés de la Roma, que lo cederá por un año muy posiblemente por consejo directo de Monchi. El ex director deportivo del Sevilla siempre lo tuvo entre sus preferencias como pivote, pero no fue hasta el año pasado, ya en Roma, cuando pudo sacarlo del Lyon, por unos cinco millones de euros.

Gabriel Pires podría ir al Benfica y el Sevilla replantearse los puestos de medio y central, en el que Amadou puede rendir muy bien y dejar el hueco en el eje a Gonalons, un medio centro puro, con 1,87 metros de altura y mucha experiencia en Liga de Campeones y Liga Europa. Se trata de un futbolista más similar al perfil de N’Zonzi que Gabriel, dado que éste es un jugador con más llegada y quizá lo que necesitara el Sevilla, tras la venta del campeón del mundo, sea ese otro perfil más de pivote que de creador. Sólo falta la oficialidad de la negociación, adelantada por este diario. El Sevilla estaba cerrando ayer su cesión con opción de compra.

Con todo, la Liga ya asoma con varios deberes por hacer. A la decepción de que Joaquín Caparrós no pudiese hacerse con los servicios de Batshuayi, determinado a jugar la Champions con un rival directo como el Valencia, se une ahora un runrún que siempre ha estado ahí latente, la situación de Sarabia. Estando el Sevilla en Tánger surgió una noticia que dio esperanza según se interpretara: la dirección de fútbol había logrado el plácet para realizar un esfuerzo en pro de la renovación de Sarabia. Pero esto no quería decir que hubiese acuerdo para que el jugador firmase la nueva propuesta sevillista. El agente del madrileño, Ginés Carvajal –uno de los más influyentes del mercado español–, sigue apretando las tuercas y ahora surge un riesgo de mucho más peso que el de la Real Sociedad: de nuevo el muy reforzado Valencia.

Actualmente el equipo che está enfrascado en otros asuntos, pero la asequible cláusula de 18 millones de euros continúa siendo un reclamo para cualquier club con potencial que necesite tirar de Sarabia en un momento de urgencia. Desde diversas fuentes vinculan el presunto interés valencianista en Sarabia a un posible traspaso de Rodrigo al Madrid. También al destino final de Guedes, por el que Mateo Alemany sigue peleando para desbloquear la negociación con el PSG, con el que no está jugando ni entrando en las convocatorias. En el día de ayer oficializó el Valencia el traspaso de Zaza al Torino, y la actualidad se centra allí ahora en el extremo portugués. Lo de Rodrigo y Sarabia, de momento, es otro runrún inquietante para la afición sevillista.

Caparrós dijo que el Sevilla le había hecho “una muy buena propuesta” a Sarabia, una oferta que destacó con “letras mayúsculas”. Pero en la otra parte no entienden que esa elevada propuesta sea acorde a lo que debe cobrar Sarabia en el Sevilla. Ahora mismo, parece que el jugador madrileño tiene la sartén por el mango de nuevo, dado que, con cuatro goles, es el máximo goleador. Y esos nervios transmitidos en las redes sociales son un arma más para el agente de Sarabia en la mesa negociación. Y en ésta no valen los nervios.

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios