Sevilla FC

El retraso del nuevo edificio de la ciudad deportiva del Sevilla: los plazos y las críticas

Quique observa un entrenamiento con el edificio para el primer equipo al fondo: se ve la puerta del gimnasio.

Quique observa un entrenamiento con el edificio para el primer equipo al fondo: se ve la puerta del gimnasio. / Juan Carlos Muñoz

El lema era rimbombante y contó con un presupuesto inicial de 20 millones de euros. Construyendo el Sevilla del futuro era el título del proyecto que englobaba el estadio Jesús Navas, con varios años ya en uso, y el nuevo edificio exclusivo para el primer equipo. Cada obra se llevaba 10 millones de euros de inversión. Con el estadio en pleno funcionamiento, incluyendo las oficinas de los altos ejecutivos del club y sus distintos departamentos, la controversia gira en torno al evidente retraso del nuevo edificio para el primer equipo, cuya primera piedra se puso el 9 de septiembre de 2021. Entonces se estimó la entrega de la obra y la entrada en funcionamiento en año y medio, o sea, en marzo de 2023. Ha pasado ya un año, está próximo a inaugurarse y José María del Nido no ha desaprovechado tal oportunidad.

El edificio, en realidad un conglomerado de instalaciones, ya está terminado y ya se arreglaron meses atrás las filtraciones de agua. Pese a ello el máximo accionista ha utilizado en esta semana de parón para realizar otra diatriba contra el consejo de administración.

¿Qué falta entonces para que empiece a funcionar? Las habitaciones ya están completas, pero falta el mobiliario de otras dependencias y las máquinas del gimnasio. La obra, en puridad, está completamente terminada, incluido su nuevo acceso, y en breve espera el club inaugurar el conjunto. No quiere hacer uso antes de algunas de sus instalaciones que ya son funcionales completamente.

Es el caso del Cubo, el set multimedia y televisivo, que ya podría estar funcionando. También está terminado el gimnasio que incluye el edificio, así como las 40 habitaciones para los futbolistas y los técnicos. Falta el mobiliario en algunas estancias, máquinas nuevas de ejercicios y trasladar las del antiguo gimnasio al nuevo. Éste está imbricado en el nuevo edificio y con puerta a uno de los dos campos de fútbol en los que ya entrenan los jugadores hace meses. Es la puerta que está bajo el gran 1890 que corona la fachada visible desde el campo de entrenamiento. Los jugadores en cambio siguen entrenándose en el gimnasio junto al estadio Jesús Navas, el de siempre con tejado a dos aguas y el escudo del club en su frontispicio.

El martes, Del Nido Benavente llamó a los actuales consejeros Pepe Gotera y Otilio, en tono mordaz y poniendo el acento indirecto en las filtraciones de agua que ya se arreglaron. Hubo quien le recordó en el propio tuit del ex presidente que él prometió una reforma integral del estadio que nunca comenzó y que incluso presentó por todo lo alto un proyecto de ciudad deportiva en Bollullos de la Mitación que fue rechazado por la Junta de Andalucía por incumplir el Plan de Ordenación del Territorio de Andalucía (POTA) y la Ley de Ordenación Urbanística, ya que implicaba la construcción de 2.300 viviendas que iban a quedar como un nuevo gran núcleo residencial fuera de la SE-40. Todo quedó en el aire.

El actual consejo no tuvo esas cortapisas urbanísticas porque la obra es sobre la propiedad inmobiliaria del club. Pero sí ha tenido un importante retraso que, en parte, la actual dirigencia del Sevilla achaca a la incidencia negativa que tuvo el Covid en la provisión de algunos materiales y la propia economía del club. Aunque toda obra se suele retrasar sobre el tiempo proyectado, suena a excusa lo del Covid.

De todas formas, parece que antes de que termine esta temporada estará ya terminada toda la obra con el mobiliario, que es lo que queda pendiente. Ocurre que el edificio es bastante grande e incluye muchas zonas con muebles especializados. Concretamente, en la planta baja del mismo van los vestuarios, el salón comedor, el centro médico, los almacenes para los utilleros y la utillería. Y para el cuerpo técnico, despachos, salas de vídeo y otras estancias. Y en la planta superior van las 40 habitaciones, 30 de ellas individuales y otras diez dobles, destinadas al descanso de la plantilla, incluso para concentraciones en la propia ciudad deportiva. Toda la nueva instalación incluye tres campos, ya en funcionamiento, y un aljibe para recoger y reutilizar agua de lluvia para regar los céspedes.

Este viernes, Del Nido volvió a tuitear con sorna. “Otro récord: tardar para un solo edificio en la ciudad deportiva más que en construir la Sagrada Familia”. Una exageración... aunque el retraso de un año invite a sesgadas hipérboles.

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios