¿Qué son los refugios climáticos y cómo pueden hacer frente a los episodios de calor?

Greenpeace explica que este concepto está íntimamente relacionado con la regla 3-30-300, que promueve las ciudades verdes para ayudarnos a vivir mejor

El PSOE denuncia que Sevilla sigue sin refugios climáticos en plena ola de calor

¿Qué son los refugios climáticos?
¿Qué son los refugios climáticos? / EFE

La ola de calor se alarga en Sevilla y, según las previsiones de la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet), las máximas superarán los 40ºC durante varias jornadas. Ante esta situación, el Grupo Municipal Socialista ha denunciado que el Ayuntamiento hispalense sigue sin activar una red de refugios climáticos públicos, pero ¿qué entendemos exactamente por este concepto?

"Un refugio climático es una zona natural o urbana que ofrece unas condiciones ambientales benignas para protegerse de un contexto desfavorable, como el exceso de calor o la escasez de agua", explican desde el grupo ecologista CREAF (Excel-Lència Severo Ochoa). Esto puede darse en un parque, una zona arbolada, un paseo o en espacios de fuentes con acceso a agua natural; e incluso en entornos cerrados y convenientemente climatizados.

Refugios climáticos, una solución frente al calor

Consciente de esta necesidad, el alcalde de Sevilla, José Luis Sanz, ha hecho referencia recientemente al objetivo de dotar a la ciudad de una mayor cantidad de zonas de sombra, así como también de "incrementar la masa arbórea y nuestro patrimonio verde" en su conjunto.

La idea de los refugios climáticos está íntimamente relacionada con la regla 3-30-300, bajo una premisa muy sencilla: cómo una ciudad verde puede ayudarnos a vivir mejor. Sobre este asunto, un informe elaborado por Greanpeace incide en la necesidad de que todas las urbes permitan que cada ciudadano pueda ver tres árboles desde su casa, tener un 30% de cobertura vegetal en su barrio y estar a 300 metros de un parque decente.

Además, "las ciudades deberían contar con 50 metros cuadrados de superficie vegetal por habitante", asegura la entidad ecologista. En este sentido, sostiene que la protección frente a las olas de calor va más allá de las precauciones individuales. "Es fundamental que nuestros entornos, viviendas, barrios y municipios nos protejan", explica en otro artículo. Para ello, "los refugios climáticos son espacios públicos y privados que se ofrecen como resguardo ante las altas temperaturas".

Cómo debe ser un buen refugio climático

La condición para establecerse como refugio climático es, según Greenpeace, que sea accesible a todas las personas, cercano, cómodo, gratuíto, con un horario de apertura amplio y fácilmente identificable. "Para adaptarnos al cambio climático hay que transformar los municipios en lugares más resilientes, saludables y amables".

Actualmente, se estima que hay 2.122 refugios climáticos en España, "aunque no existe un registro oficial debido a la falta de regulación de estos espacios", tal y como se desprende de un estudio elaborado por Investigaciones Turísticas en 2024. Se trata de una cifra insuficiente, ya que equivale a uno por cada 23.000 habitantes.

La existencia de refugios climáticos puede ayudar a contrarrestar los efectos del fenómeno conocido como 'isla urbana de calor', que provoca un notable incremento térmico en el interior de las ciudades con respecto a sus áreas naturales circundantes. La diferencia puede ser, en algunos casos, de hasta 8ºC; y esto se debe a factores relacionados con las infraestructuras del lugar y la actividad humana.

stats