Si te quedas corto de sal en las comidas o eres hipertenso estos cubiertos te alegrarán la vida

Los avances científicos en materia sanitaria siempre dan muchísimo de qué hablar, y constituyen un antes y un después en el bienestar de las personas. Sin ir más lejos, los avances en materia de vacunación contra el Covid-19 encabezados por diferentes laboratorios han conseguido que se avance hacia la vuelta a la normalidad y se reduzcan inmensamente las cifras de contagios y fallecimientos por el virus.

Sin embargo, muchas veces se pasan por alto o se obvia la relevancia de algunos avances centrados en el mundo culinario, que ayudan a aquellas personas con problemas digestivos, alergias u otras patologías a poder disfrutar de una dieta más completa que no ponga en peligro su salud.

El último de estos ensayos clínicos relacionados con la alimentación viene directo de un país, como siempre, a la vanguardia de la ciencia y tecnología internacional, y este es Japón. En la universidad de la ciudad nipona de Meiji se han comenzado una serie de estudios para poder sacar al mercado esta tecnología que marcará un hito para todas aquellas personas que precisan de seguir una dieta baja en sal:

Palillos eléctricos potenciadores del sabor

Los palillos son, posiblemente, el cubierto que mejor define la gastronomía japonesa y de muchas otras partes del continente asiático. Por ello, se ha comenzado a desarrollar una variante de los mismos que administran estímulos eléctricos débiles al alimento que se consume utilizándolos, de manera que se ajustan los iones en el glutamato de sodio presentes en el propio alimento llegando a potenciar su sabor sin añadir sal.

De acuerdo con los resultados de las pruebas que se han realizado hasta la fecha, se ha llegado a aumentar el sabor de algunos alimentos con el uso de estos palillos hasta un 1,5 más utilizándose muestras con un 30% menos de sal que otros alimentos convencionales.

En definitiva, si esta tecnología consigue finalmente desarrollarse, patentarse y comercializarse, podemos estar hablando de un cambio radical en la alimentación mundial que limite la sal en toda dieta y por tanto reduzca los riesgos de aumento de presión arterial y otras patologías generadas por el consumo demasiado asiduo del famosísimo condimento.

Queda esperar si estos experimentos finalmente llegan a conclusiones sólidas y definitivas y si este artilugio puede tener éxito en el resto del mundo, sea en su formato original o en uno más occidentalizado como un tenedor con la misma tecnología.