Los distintos grupos de la oposición acogieron con expectación las medidas cautelares dictadas por la juez Mercedes Alaya, en un auto judicial que salió ayer a la luz pública, en contra de los intereses de Manuel Ruiz de Lopera.

Una de las plataformas que acogió con mayor satisfacción las noticias procedentes de los juzgados fue Por Nuestro Betis (PNB), que mediante su presidente, José Tirado, dejó clara su postura: "Estamos satisfechos por el contenido del auto. Lo que ha ocurrido es muy importante, porque por fin hemos visto que Lopera había conseguido las acciones de forma no lícita. Ahora, el camino a seguir es el de un nuevo Betis en el que no haya personalismos de ningún tipo".

En cuanto al futuro del club, Tirado manifestó el deseo de unión entre todo el beticismo de cara a la celebración de una junta general de accionistas que, a priori, deberá celebrarse el próximo 20 de agosto: "El actual consejo de administración existente debe convocar una junta extraordinaria. Dijeron que el 20 de agosto, pero si no lo hacen la convocará la juez, ya que nosotros la pedimos hace más de tres meses por vía judicial. Espero que antes de esa fecha se haya constituido un consejo de unidad".

En una línea parecida a Pepe Tirado se manifestó Miguel Cuéllar, presidente de la Fundación Heliópolis (FH), que, también, exigió la unidad de todo el beticismo: "Mandamos un mensaje de esperanza, pues se cierra un ciclo con más sombras que luces. En esta etapa tan desafortunada del Betis se ha generado un movimiento de béticos que siempre han dado la talla. Por eso hacemos un llamamiento a la unidad de todos ellos. Desde la Fundación Heliópolis estamos dispuestos a darles ayuda".

De cara a la situación de vacío de poder en la que puede quedar el club, Cuéllar espera que la juez "tome cartas en el asunto y ponga a un administrador", y le pide al actual consejo del club que "actué en beneficio del Betis". Por último, Cuéllar recalcó que "la venta de Oliver no se ha producido en ningún caso, pues el CSD no ha dado vía libre para la compraventa de las acciones de Farusa. Luis Oliver no tiene ningún derecho en el Betis". Esta idea también quedó reflejada en las palabras de Adolfo Cuéllar, representante de la Liga de Juristas Béticos (LJRB): "Esta situación es crítica, pero va a ser para bien del Betis. Sólo los béticos vamos a levantar esto".

Otro de los grupos de oposición, Béticos por el Villamarín (BXV), a través de su portavoz, Emilio Soto, ofreció un punto de vista más agresivo. Sobre todo, en cuanto al papel de la Fiscalía: "El auto ha sido una bomba esperada, pues la juez ya preveía que el delito era muy serio. Lo que es anómalo es la actitud de la Fiscalía, que parece que se ha puesto a favor de los intereses del acusado".

Soto confía aún más en el segundo informe de los peritos, pues considera que se podrá comprobar, de nuevo, los movimientos realizados por Lopera en su gestión al frente del Betis: "Los peritos han realizado un informe de la primera etapa, pero si la juez pone 25 millones de euros en el auto será que tiene más información. El segundo informe será otra bomba. A ese señor hay que echarlo del Betis y el paso siguiente será echar a sus cómplices".

Por último, Soto dio a conocer las medidas que BXV está estudiando para que los béticos sean los dueños de la entidad: "Nuestro ideario es el mismo que el de hace dos años: limpiar el club y devolver el Betis a sus aficionados. Nosotros ya hemos hablado con cajas de ahorro para que los béticos compren, cada uno con su carnet, una acción. Así, en dos años, el club será de ellos".

Una de las personas más felices ayer fue Alfonso Jaramillo, presidente de honor de la Agrupación de Béticos Veteranos (ABV), que, emocionado, ofreció su punto de vista sobre el auto. "Le pedí a Dios ver al Betis libre y me lo ha concedido", dijo, a la vez que pidió que se le cambie el nombre al estadio por el de Benito Villamarín: "Espero que el campo vuelva a llamarse con su nombre, pues él le dejó al Betis un gran patrimonio".