De la cordialidad al enfado

Desde hace algunos años, la normalidad impera en la rivalidad sevillana y así se desprende de la relación cordial entre los dirigentes de ambos bandos. El mensaje enviado en la previa del encuentro, y reiterado por el alcalde, Juan Espadas, en los prolegómenos, se cumplió a la perfección, y los únicos sobresaltos en el palco correspondieron a los propios de un duelo de alta intensidad y que también encontró sus jugadas polémicas, lo que alimentará el morbo de las conversaciones de los próximos días.

"Los derbis son de mucha pasión y espero deportividad y que gane el mejor. Es una temporada en la que hay proyectos deportivos encima de la mesa por parte del Sevilla y del Betis apasionantes, y mucha inquietud también por parte de las aficiones para ver cómo se van definiendo los dos equipos. Es un derbi que se produce muy pronto y creo que va a ser muy emocionante", indicó Espadas, que acertó en su pronóstico previo en un derbi que se decidió por la mínima.

Si la felicidad en clave sevillista se trasladó a la sonrisa de su presidente, José Castro, menos satisfecho acabó su homólogo bético, Ángel Haro, que lamentó el error arbitral, aunque sí felicitó a sus jugadores por el trabajo.

"Me voy fastidiado por el resultado, que no se corresponde a lo visto. Hemos sido perjudicados por el grave error arbitral", señaló el máximo dirigente verdiblanco en los medios oficiales de la entidad nada más finalizar el choque. "No es el primer error que sufrimos esta temporada y que afectan a los resultados. Dicen que al final de la Liga se compensan errores a favor y en contra, y a ver si empiezan a favorecernos", reclamó Haro, que recordó acciones de otros duelos.

Pese a todo, el presidente prefirió lanzar un mensaje de optimismo hacia el futuro. "La fórmula es no quedarse en el lamento y seguir trabajando. Nos quejaremos porque estos errores condicionan partidos, pero no entraremos en guerras que nos distraen. La manera de tirar hacia delante es trabajar. No queda otra", indicó el presidente, que al menos se fue satisfecho con la imagen ofrecida por su equipo: "No ha tenido nada que ver con los derbis anteriores y hay que felicitar a los jugadores por su entrega en el césped. Es el camino. La sensación es positiva, aunque los resultados no llegan. Será el trabajo el que nos ponga en nuestro sitio, pero estoy satisfecho con la entrega y compromiso de los jugadores".

Y así se puso punto final al primer derbi de la temporada, en el que la cordialidad dio paso al enfado en verdiblanco.