El muro psicológico pesa

Más que el muro que formó el potente bloqueo del Voley Palma, lo que pesó ayer en Los Montecillos fue el muro psicológico que tienen ante sí los jugadores del Cajasol, que no pudo romper la dinámica perdedora de los últimos encuentros y encajó su sexta derrota consecutiva. Por suerte, el trabajo está hecho gracias a la buena labor realizada en la primera vuelta y, aunque el play off se palpa con las manos, el regusto amargo por la sensación de que el equipo da para más le queda a todo el mundo.

Pocas opciones tuvieron los de José Manuel González, Magú, frente a todo un histórico, más por los fallos propios que por los aciertos de un rival que basó su triunfo en un sólido bloqueo y una buena defensa que permitía montar con comodidad el ataque. Mención aparte merecen los colegiados del encuentro, ciegos ante las continuas retenciones de los isleños que permitían a éstos levantar balones imposibles o a su colocador poner -o acompañar, mejor dicho- bolas a sus rematadores desde muy abajo.

En cualquier caso, la derrota sevillana no vino dada por los fallos (garrafales en algunos caso) de los árbitros, sino los continuos errores en el saque y la defensa que llevaron a Magú a reunirse con sus jugadores en el vestuario a la conclusión del choque. Y eso que el encuentro bien pudo caer del lado local si en la primera manga no hubiesen desperdiciado hasta cuatro puntos de set tras remontar un 16-20 en contra. El tiempo muerto del técnico cajista en ese momento surtió efecto y, con un recuperado Fran Ruiz en el servicio, los nazarenos se pusieron por delante 22-21. Después, con 24-23, 25-24, 26-25 y 27-26, el Cajasol estuvo en disposición de anotarse el primer parcial, pero los mallorquines aprovecharon los fáciles saques andaluces y los fallos en ataques del Cajasol para adjudicarse el set (28-30).

La mejora en el juego cajista tuvo su continuación en la segunda manga, dominada de principio a fin por los de Magú. Con Fernando como referencia en ataque, De Amo moviendo bien al equipo y sorprendiendo con dejadas en segundo tiempo y los saques de Fran Ruiz, que todavía no está al 100%, los sevillanos pusieron la directa. Con 19-13 el entrenador visitante, Gilman Cao , dio por perdido el set y dio descanso al opuesto Gevert, una pesadilla en ataque para los sevillanos y al que le sobraron un par de gestos bastantes desconsiderados. Con todo, el Cajasol se relajó y con dos saques directos de Meruvia el conjunto balear se puso 23-21. Las alarmas se encendieron, pero no saltaron y los locales se llevaron la manga.

A partir de ahí, al conjunto de Dos Hermanas se le apagaron las luces, se le acabó la gasolina, se le fundieron los plomos... El intercambio de golpes del tercer set se acabó antes del segundo tiempo técnico (13-16). El Voley Palma supo rentabilidad la renta para imponerse 20-25. El Cajasol acusó el golpe. Tanto, que ni siquiera dio guerra al final. Un 1-7, con el potente saque del excéntrico Giver al comienzo del que sería cuarto y último set sentenció el duelo, y casi acaba con cualquier esperanza de los sevillanos por alcanzar la quinta posición de cara al play off. Ahora hay que amarrar el sexto puesto en las cuatro jornadas que quedan y cortar la sangría de derrotas. La visita al colista Caravaca la semana que viene es una buena oportunidad para hacerlo.