El Banco Central Europeo subió los tipos de interés, un aumento que tendrá consecuencias para las familias, pues las hipotecas serán más caras y los préstamos tendrán unas condiciones más duras. Esta subida es una decisión que ha tomado el BCE para frenar la inflación antes de que sea demasiado tarde y se entre en una recesión. 

"Si los datos sugieren que debemos decidir un alza de tipos elevada, lo haremos", ha comunicado Christine Lagarde, presidenta del Banco Central Europeo, en una rueda de prensa, después de que la iniciativa saliera adelante por unanimidad en el Consejo de Gobierno del BCE.

Esta subida afectará a las familias. No afecta directamente a los créditos, pero sí al euríbor, que está directamente relacionado con las hipotecas, ya que en España, el 80% de estas, están referenciadas al euríbor. Por lo que las cuotas van a encarecerse cuando los bancos reexaminen el tipo de interés, algo que suele ser una vez al año.

Por poner un ejemplo, si el Euríbor cerrase septiembre en el 1,9%, una hipoteca de 100.000 euros se encarecería en 84 euros al mes o en 1.000 euros al año.

Los expertos recomiendan tener precaución, hacer números y tener en cuenta que las hipotecas son préstamos a muy largo plazo, de hasta 30 años, periodo en el que los tipos pueden subir y bajar varias veces, al ritmo que marque la inflación y la economía de cada momento.

Olivia Feldman, cofundadora de HelpMyCash.com, le asegura a El País que "las hipotecas variables van a ser cada vez más caras y los españoles van a tener que dedicar cada vez una mayor parte de su nómina para pagar su vivienda”.

Inclusos se prevé que el BCE siga subiendo los tipos con el objetivo de continuar frenando la inflación. Algunos expertos pronostican que a lo largo del próximo año el euríbor podría llegar al 2,3% y otros apuntan que al 3%.

Este aumento del euríbor afecta tanto a las personas que ya cuentan con una hipoteca variable como a las que vayan a contratar una nueva. También las hipotecas fijas, que en los últimos años han aumentado bastante, serán más caras. El interés ha subido un 0,10% con el aumento de los tipos: del 2,4% al 2,5%.

Más dificultades para vender una vivienda, otra consecuencia de la subida de tipos

Otra consecuencia que puede darse tras la subida de los tipos es que sea más complicado vender una vivienda. Y es que si las hipotecas son más caras y, por lo tanto, la dificultad de conseguir una es más alta, la venta de viviendas caerá. Por lo que las personas que están intentando vender una necesitarán más tiempo para hacerlo y, quizá, bajar el precio.

Aunque aquí también entra en juego la guerra de Ucrania, que está haciendo que los costes de producción de nuevas viviendas sean más altos, por lo que está posible bajada de precios, como consecuencia de la subida de tipos, igual tarda un poco de tiempo en llegar.