ELECCIONES MUNICIPALES 2023

Miguel Ángel Aumesquet: “Ni la caridad, ni las ayudas pueden sacar a los barrios de la pobreza”

Tres propuestas para Sevilla / Miguel Ángel Aumesquet / Juan Carlos Vázquez

-Los primeros sondeos no dan a su partido ninguna representación en el Consistorio. ¿Cómo afronta este punto de partida?

-Con más empeño y ganas de hacer llegar nuestras propuestas, que son las más coherentes para mejorar la vida de los ciudadanos. De todos modos, las encuestas en España ya no son sondeos de tendencia de voto. Entendemos que están financiadas por los dos grandes partidos y son, más bien, manipuladoras del voto y se hacen para llevarlo a un destino concreto. Hace tiempo que no coinciden con los resultados de las elecciones, con lo cual nos preocupan relativamente.

-Entiendo que es un reto ser la cabeza visible de la formación con este contexto.

-Me dicen mucho que es un acto valiente, pero sigo coincidiendo con los principios de igualdad y de coherencia que me trajeron a Ciudadanos en 2015. Sobre todo de hacer menos política y más gestión. Hablo del municipalismo, porque aquí venimos a gestionar y mejorar la vida de los sevillanos.   

-Una de grandes medidas es la creación de una delegación de Transformación Económica, Autónomos y Universidad. ¿En qué consiste?

-Una ciudad económicamente fuerte con empleo de calidad e inversiones de vanguardia es la que puede sacar a los barrios más desfavorecidos de la pobreza. No es la caridad ni el subsidio, sino el empleo de calidad. Además nos preocupan nuestros jóvenes, a los que obligamos a marchar fuera de Sevilla cuando terminan sus estudios. Si se les dieran facilidades para emprender y para optar a viviendas asequibles, no tendrían que marcharse y el padrón no seguiría bajando.

-Ya existe una delegación de similares características en Sevilla que depende de la Junta. ¿Trabajaría de forma conjunta?

–Algo muy intrínseco en el ADN de Ciudadanos es la colaboración entre administraciones. Lo sabe el PSOE en el Ayuntamiento y el PP en la Junta de Andalucía. Efectivamente, me miro en el espejo de Rogelio Velasco que fue el que sustituyó la consejería de Economía por la de Transformación Económica y Universidades. Este cambio fue la palanca que provocó que Andalucía modificara su modelo productivo atrayendo inversiones en investigación e innovación y sirvió como efecto tractor para nuevas empresas. 

-Una de las principales reivindicaciones de Ciudadanos en la anterior legislatura fue el cercanías desde Santa Justa al Aeropuerto. Este año, la apuesta es por las líneas 2 y 3 de metro.

-Estamos en un momento crucial. Hemos trabajado estrechamente con Sevilla Quiere Metro y también con nuestros diputados en el Parlamento Europeo y sabemos que si la Junta de Andalucía quisiera se podría comenzar la otra media línea 3 antes de que finalice el año. Para que la construcción del primer tramo no se solape con la segunda. Además durante estos cuatro años hemos descubierto que en otras ciudades el cercanías funciona como una línea de metro más. Por otro lado, nos preocupan los errores que se cometen con el transporte colectivo. Aparte de una reordenación de líneas, se necesitan inhibidores semafóricos para las Líneas Express y que el 20% de sus recorridos sean sobre un carril bus. 

-Lleva 20 años dedicándose al sector turístico. ¿Cómo ve la situación en la ciudad y qué propone para su gestión?

–El turismo es uno de los acontecimientos de más éxito que ha tenido Sevilla en las últimas décadas. Todos los actores empresariales y turísticos lo han hecho tan bien que medio mundo quiere venir a Sevilla. En la gestión privada, cuando un caso de éxito no se administra bien, se vuelve un fracaso. No hemos abierto la capital a la provincia. Están Carmona, Utrera, Itálica, Osuna...¿Por qué no hemos colaborado entre administraciones cuando tenemos estas localidades casi despobladas y tienen el potencial suficiente para desconcentrar el turismo de Sevilla? Por otro lado, no hay inspecciones en muchas cuestiones como los pisos turísticos y de los más de 20.000 que hay en la ciudad, muchos no tienen licencia. Tenemos la obligación como Administración de intervenir lo menos posible, pero sí tenemos que ser vigilantes de que cualquier industria productiva no afecte a la ciudadanía negativamente.  

-Ha afirmado que un concejal del Ayuntamiento no puede ganar lo mismo que un ministro, pero los sueldos se deciden en sesión plenaria.

–Cuando se aprobó la subida de sueldos en 2019 nosotros nos abstuvimos, porque no tenemos que tener un sueldo muy superior a un consejero de la Junta. No sólo son los sueldos. Cuando un sevillano pide una cita médica, tardan en dársela unos 20 días, a no ser que sea concejal del Ayuntamiento de Sevilla con el seguro de sanidad privada que han pagado todos los ciudadanos. Pasa lo mismo con el coche oficial. Somos una de las dos capitales de España en la que los concejales los siguen teniendo. Estamos todo el día diciéndole a los ciudadanos que cojan la bici y el autobús, pero nosotros cogemos un coche que nos impide ver la realidad de la ciudad. Es inaudito y no deberíamos tener ningún privilegio que no tengan los sevillanos.

-Una propuesta llamativa es el traslado del recinto ferial a Tablada.

–Tiene varias finalidades. La primera, recuperar Tablada como Sistema General de Espacios Libres para  los sevillanos, llegando a un acuerdo con sus actuales dueños. Por otro lado, solucionamos la carencia de viviendas públicas y asequibles. Sobre los terrenos que actualmente ocupa el recinto ferial, se podría crear una zona residencial con 6.150 viviendas. La mitad de protección oficial y otra mitad de alquiler asequible. La tercera finalidad es recuperar completamente la Dehesa de Tablada para que conforme un auténtico pulmón verde. La Feria se ha quedado chica y es un modelo de elitismo y de privilegios, con una lista de espera de más de 1.000 casetas.

-¿Cómo se puede luchar contra el cambio climático desde Sevilla?

–En primer lugar, no engañando a la ciudadanía. En 2019 se declaró en el Ayuntamiento la situación de emergencia climática y no se hizo nada más. En segundo lugar, dotando de más sombras a la ciudad. En los puentes, en las calles peatonales, en las paradas de taxis, para los parques infantiles y para los coches de caballo. En definitiva, sombra más allá de la calle Tetuán y la Campana. Como tercera medida, aunque hay muchas más, poner en funcionamiento sistemas de energías renovables y alternativas. El Ayuntamiento debería ser un ejemplo y tener placas solares en todos sus edificios.

-Hace un llamamiento al sevillano rebelde. ¿Quién es este votante?

–El sevillano que ve que su ciudad no da ni un paso importante desde hace 30 años. El que ve que las tasas que paga redundan en que cada vez hay más políticos colocados a dedo al Ayuntamiento. El sevillano rebelde es el que antes se llamaba clase media y ahora clase exprimida. El que todo lo paga, pero siempre se queda a un punto coger la beca, la subvención o la ayuda. Ese es el que quiero que se rebele contra dos partidos que desempolvan las mismas promesas y las vuelven a presentar con toda la caradura del mundo.

  

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios