La salamanquesa del patio de mi casa

"Hay que ver como se transfigura Sevilla estos días, parece otra ciudad , que incluso es capaz de mudar la piel de su gente, sus tertulias, sus hábitos, su indumentaria". "Es entrañable el encuentro a tu paso de grupos de jóvenes por las setas, con zapatilla deportiva y sudadera abrochada, manteniendo conversaciones ancestrales sobre el último relevo, tú sabes, que se sale del palo y seguro lo adelantan una trabajadera más, mientras se peinan con la mano el desaguisado del costal". "Entre los que caminan portando impecable traje y escudo en solapa hacia la Magdalena, y los que visten uniforme militar del que pende la corneta apresurándose al Santo Ángel, parece que se esté grabando una serie de época en la calle San Pablo".

"No hay palabras para describir la solemnidad de los cultos del Baratillo en el templo de San Jorge, sede litúrgica del Hospital de la Santa Caridad al amparo del alma de Don Miguel de Mañara, quizás por el marco incomparable del altar de Roldán y sus yeserías en la bóveda, o tal vez el sello de Valdés Leal en sus lienzos, o la cercanía de María Santísima de la Piedad entre sus fieles y devotos, o la esencia del inmortal venerable y sus desheredados... Si a todo ello le sumas el momento de calidad musical en el que se encuentra la Coral Sacra de Arturo Artigas el resultado es un viaje al éxtasis de los sentidos, que bien pudiera corresponder a la entrada triunfal en el pórtico de la Gloria eterna".

"A vía crucis por hermandad, más el General del Consejo, a lo que hay que añadir los traslados de imágenes que celebran sus cultos en parroquias o templos de mayor capacidad para sus hermanos, ensayos de costaleros, mudás de los pasos, conciertos de bandas en plazas y pasacalles, y un sinfín de descargas de artesanos, cereros, floristas y restauradores, me dicen desde el Ayuntamiento que van a abrir plazos de solicitudes a la Policía Local para unos dos mil setecientos nuevos agentes cuaresmales, y que el resto del año se dedicarán a capturar cotorras y a ayudar a cortar claveles para las vendedoras ambulantes. Hay que darle una vuelta a esto, que lo excelente es enemigo de lo bueno".

"Es un espectáculo ver los regueros de personas buscando Matahacas o la calle Alcaicería para el arreglo de la túnica por el estirón, el antifaz de nuevo terciopelo que el anterior se ha quedado marcado, el esparto gastado o los escudos bordados para el nazareno que se estrena, que antes se lo hacía la abuela pero ya no está la pobre para eso. Y las largas colas que se forman a las puertas de la exposición del Mercantil, o la del parto de trillizos de Cajasol, emoción y filigrana en el arte de los Hermanos Delgado, la elegancia del realce decimonónico de Teresa del Castillo, y Salustiano... si no querías pan, pues toma dos bollos".

"Dicen que la inmensa mayoría de las marchas que componen los repertorios clásicos andan soterradas en los cajones de los archivos de las distintas hermandades, desempolvadas con suerte de vez en cuando para alguna efemérides". "A los compositores actuales se les critica cierta falta de creatividad y sobra de estridencia, y es que cada año se estrenan trescientas nuevas composiciones, de las cuales sólo un tercio sobrevivirán al año siguiente. Pues visto lo visto con lo que sucedía con las mal llamadas clásicas, tampoco ha cambiado mucho el escenario respecto a las de Farfán, Gámez Laserna o Font. Quizás habrá que pensar que la música es un arte vivo y evolutivo, y que siempre quedarán en los distintos repertorios una muestra de lo mejor de cada época. El momento actual de las bandas es de entrada inmejorable". "Eso se resuelve poniendo un músico al cargo de los repertorios... deja, deja, que las marchas que subsistan sean las que tararee el pueblo, que esto no es la Ópera de Viena".

"¿Te has enterado de la polémica del cartel? ¿Y la que tienen montada con el IVA de las sillas, y el IPC de los abonos?...Y ya ni te cuento de la ruptura de relaciones entre hermandades por culpa de la reestructuración de los días, y que a pesar del malestar se mantengan los planes del Consejo. El año que viene dicen que el Señor tendrá que aumentar el rodeo, ya por la calle Castilla….. Calla, salamanquesa, mientras huela a azahar por Sevilla y a incienso en la calle Córdoba, lo demás a nadie le importa".