"Desde el fin de semana del 1 de octubre estamos horrorizados". En esa fecha ubica Guadalupe Gómez, presidenta de la Asociación Vecinos Ecologistas Parque de Los Príncipes, el inicio de las malas prácticas dentro del Parque de los Príncipes. Unas conductas realizadas por jóvenes y que consisten, fundamentalmente, en la organización de botellones y carreras de patinetes eléctricos. Dos actividades peligrosas para los paseantes del parque, principalmente los más pequeños. "Los cristales rotos de las botellas se lo pueden clavar los niños o los perros", explica Guadalupe, que ya acumula casi un lustro defendiendo al pulmón verde ubicado en el final del barrio de Los Remedios.
El consumo descontrolado de alcohol en el recinto no es el único problema que denuncia esta asociación vecinal, que incide en la utilización de patinetes eléctricos en el interior del parque. Algo que, como se indica en los paneles informativos de las puertas, está prohibido al ser un vehículo a motor. "Hacen carreras y ponen en peligro a los que aquí venimos a relajarnos", comenta. La erradicación de estos comportamientos también dice que es compleja, puesto que "hace 5 o 6 años la vigilancia del parque pasó de la Policía Local a una empresa privada". Guadalupe asegura que "sólo hay un guarda o dos para más de seis parques", aduciendo a la falta de vigilantes uno de las razones de la situación que vive el parque los fines de semana. Ella misma propone al Ayuntamiento cerrar la mayoría de puertas en las horas clave de entrada de jóvenes y controlar el acceso para dotar al lugar de mayor seguridad y confort. Otro aspecto que agrava esta realidad es la limpieza del parque. "Lipasam sólo vacía las papeleras y hace que los jardineros se encarguen del resto", afirma esta vecina de Los Remedios, que dice estar "harta" de reunirse sin éxito con los gestores de la empresa pública de limpieza.
En una carta dirigida a Diario de Sevilla, esta asociación ecologista lamenta que "el Parque Los Príncipes no es un lugar que podamos catalogar como un centro de negocios, como sucede en interiores de bares, discotecas, y otros a los que el concejal Cabrera manda a la Policía Local a desalojar para evitar la transmisión del virus". Exigen que acudan efectivos policiales a controlar la situación "como si se tratase de un estadio de futbol, o un lugar de negocios en situación de concentración peligrosa". Y requiere coordinación con la dirección general de Parques y Jardines, así como con el concejal de Transición Ecológica para que insista en la limpieza del parque.
Comentar
0 Comentarios
Más comentarios