Una patrulla medioambiental advierte de la prohibición de capturar coquinas

Técnicos de Medio Ambiente y vigilantes municipales recorren la playa urbana de Punta Umbría para repartir información y concienciar a la población sobre la prohibición de capturar coquinas. Recoger coquinas en la playa es un delito, no una afición, así reza el eslogan con el que la Junta de Andalucía pretende concienciar a la población sobre esta practica y el Ayuntamiento de Punta Umbría, a través de la Concejalía de Medio Ambiente, ha incluido la campaña SOS Coquina en su propósito de 12 formas de cuidar el medio ambiente.

En palabras de la concejala de Medio Ambiente, Bárbara Carrasco, "esta labor informativa ya la llevan realizando todo el verano los vigilantes, pero la hemos querido reformar en el mes que dedicamos al cuidado de la playa".

Esta advertencia además va unida al cuidado de la salud ya que los bañistas desconocen las causas sanitarias que impiden la captura de bivalvos por intoxicación de toxinas. Además de que es un oficio regulado y controlado que permite ganarse la vida a los mariscadores autorizados.

El reparto de folletos y la información a pie de playa suelen ser eficaces en muchos casos, aunque los propios vigilantes aseguran que "hay de todo". Una labor difícil la de los vigilantes que, en ocasiones tienen que explicar a los bañistas que es por su propio bien.

La recogida no autorizada de coquinas puede acarrear multas que van desde los 30 a los 60.000 euros, además de la posibilidad de una intoxicación o gastroenteritis.