Muere un hombre tras ser succionado por una máquina de resonancia magnética

Un hombre de 61 años ha fallecido en Nueva York después de ser arrastrado violentamente hacia una máquina de resonancia magnética debido a la cadena metálica de gran tamaño que llevaba puesta.

El trágico incidente ocurrió el miércoles por la tarde en el centro Nassau Open MRI, cuando la potente fuerza magnética del aparato atrajo el collar metálico que portaba la víctima, según informó el Departamento de Policía del Condado de Nassau.

La muerte se produjo el jueves por la tarde, aunque las autoridades policiales no han revelado oficialmente la identidad de la víctima. Adrienne Jones-McAllister, esposa del fallecido, declaró a News 12 Long Island que ella se encontraba realizando una resonancia magnética de su rodillacuando pidió al técnico que llamara a su esposo, Keith McAllister, para que la ayudara a levantarse de la camilla.

"En ese mismo instante, la máquina lo giró, lo arrastró hacia dentro y golpeó contra la resonancia", relató la mujer entre lágrimas durante la entrevista. "Grité: ¿Podrías apagar la máquina, llamar al 112, hacer algo? ¡Apaga este maldito aparato!". Jones-McAllister explicó que su marido llevaba una cadena de 9 kilos que utilizaba para entrenamiento con pesas, un objeto sobre el que habían conversado casualmente durante una visita anterior.

Precedentes trágicos con resonancias magnéticas

Este no es el primer fallecimiento relacionado con resonancias magnéticas en Nueva York. En 2001, Michael Colombini, un niño de 6 años de Croton-on-Hudson, murió en el Centro Médico de Westchester cuando una bombona de oxígeno salió disparadahacia la cámara, atraída por el electroimán de 10 toneladas de la máquina. Los registros presentados en el Condado de Westchester revelaron que en 2010 la familia llegó a un acuerdo extrajudicial por 2,9 millones de dólares.

Las máquinas de resonancia magnética "emplean un campo magnético potente" que "ejerce fuerzas muy poderosas sobre objetos de hierro, algunos aceros y otros materiales magnetizables", según el Instituto Nacional de Imágenes Biomédicas e Ingeniería Biomédica, que advierte que estos equipos son "lo suficientemente potentes como para lanzar unasilla de ruedas al otro lado de la habitación".