El duelo Manzanares y Juli ronda la feria 2013

Los empresarios de la Merced guardan la compostura cuando se les pregunta por una feria que debe estar en la calle en aproximadamente quince días.

Oscar Polo y Carlos Pereda tienen ya su feria pergueñada en la cabeza, y aunque no lo digan, decididos a cambiar ese formato habitual de los últimos años donde las tres corridas de toros y el broche de rejones le habían funcionado a la perfección.

Nada es oficial pero todo indica que de los tres festejos de a pie, la empresa ha decidido prescindir de uno de ellos por mor de abaratar una cartelería donde definitivamente no sopla la fuerza del ciclón José Tomás, capaz de poner un abono en el ochenta y cinco por ciento del aforo.

El fenómeno de Galapagar anda con su pie fastidiado, aunque si se cumplen las previsiones de los mentideros taurinos, la reaparición va camino de ser en Málaga, feria donde el de Galapagar ya comunicó su intencionalidad de torear en el 2013 y donde hay dos empresarios de su gusto, Casas y Cutiño.

Pero volviendo a la feria de Huelva, la preocupación empresarial, más que la ausencia de José Tomás, es la profunda depresión económica que hoy por hoy asola los bolsillos de los posibles compradores de localidades.

Así que la solución se antoja necesariamente en hacer dos carteles intensos de números muy ajustados, toreros muy determinantes de cara al aficionado y poco más.

Una feria tradicional, seria, rotunda y con menos concesiones a los mano a mano, a pesar de que se esté dando por hecho de que Juli y Manzanares con los Cuvillos de por medio, va a ser uno de los carteles de la feria, posiblemente el día 3 de agosto. La lesión del alicantino lo impidió el pasado año, y todo indica que se quiera concretar en este año, aunque ya veremos. Para el otro cartel, el día 2 de agosto, los nombres de Morante y Talavante tienen todas las posibilidades de acartelarse con Enrique Ponce, un torero que puede llegar a ser casi 'novedad' en Colombinas, después de tanto tiempo sin ser anunciado en Huelva y contando con tanto predicamento entre el aficionado onubense.

El que si que parece definitivamente asentado es el cartel de rejones en la jornada dominical del 4 de agosto, que cerrará la feria. En el mismo se baraja el acuerdo con Pablo Hermoso de Mendoza y con Diego Ventura para darle realce a una tarde donde debe producirse la alternativa del rejoneador onubense Andrés Romero, ante la gente de su tierra. Romero concretó una importante temporada en 2012, mantiene importantes expectativas para esta del 2013 y aporta un componente importante para la taquilla más fiel de todas las ferias como es la del festejo de rejones, que tendrá a los toros de Luis Terrón en liza.

Aunque los dos de a caballo, Ventura y Mendoza, anden a la gresca por un quítame Bilbao, parece ser que toda la gresca se reduce por el momento a las plazas de los Choperas, con lo cual Huelva sigue en pie.

Lo que sí han descartado los empresarios, sea cual sea el número de festejos, es el hecho de argumentar alguna tarde con lo que se entiende por un hierro torista. No se van a salir del guión ganadero y apunten casi con toda seguridad que Jandilla, que lidió el ejemplar mas completo de las pasadas colombinas, será el otro hierro que complete feria junto al de la Dehesilla o José Luis Pereda, que también puede tener su sitio en los carteles definitivos.

Por otro lado, predecible por el tirón popular que tuvo el año pasado el festejo de noveles, no es difícil aventurar que los empresarios vayan a optar por abrir feria con una novillada que deje ambiente en el tendido de la Merced y no incremente el coste del abono.

Lo dicho, una feria intensa, recortada y adaptada a un publico en clave 'local' y por local se entiende todo lo que no traiga por delante la marea de José Tomás.