La Academia rinde homenaje a Antonio Barrero
La Real Academia Sevillana de Ciencias celebró ayer en el Paraninfo de la Hispalense una sesión en honor y recuerdo del que fuera uno de sus miembros, Antonio Barrero Ripoll, fallecido en abril de 2010. Ingeniero aeronáutico por la Universidad Politécnica de Madrid y, desde 1980, catedrático de Mecánica de Fluidos en la Escuela Superior de Ingenieros de la Hispalense, Barrero destacó desde muy joven, y es considerado como uno de los grandes "cerebros" científico-tecnológicos a nivel internacional. Su brillante trayectoria científica ha sido distinguida con numerosos galardones, como el Premio de InvestigaciónJavier Benjumea Puigcerver (2004), el Andalucía de Investigación Juan López de Peñalver (2006); el Premio Rey Jaime I en Nuevas Tecnologías en 2007 o el Premio Fama de la Hispalense en 2010, que no pudo recoger debido a su estado de salud.
El académico de Ciencias José Domínguez Abascal glosó su excepcional faceta investigadora; el profesor de la ETS de Ingeniería José Manuel Gordillo, recordó a Barrero como "excelso" profesor y maestro; Benito Valdés, presidente de la Academia, y Manuel García León, vicerrector de Investigación de la Hispalense, destacaron su excelencia y compromiso con ambas instituciones, y su hijo, Antonio Barrero, profesor titular de la Universidad Politécnica de Madrid, hizo una emotiva semblaza personal de su padre: "Lo mejor de mí se lo debo a él", aseguró.
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