Portland Valderrivas, la Cementera de Alcalá de Guadaíra, está analizando las consecuencias jurídicas que tiene la decisión del Tribunal Supremo de no admitir a trámite el recurso de la Junta contra la sentencia del TSJA que anuló la modificación de la Autorización Ambiental Integrada (AAI) para llevar a cabo su proyecto de "valorizar" hasta 292.000 toneladas de combustible procedente de residuos no peligrosos y sustituir al coque de petróleo que usa ahora. 

Fuentes de la compañía han precisado que "espera la subsanación por parte de la Administración" andaluza, que fue la que recurrió el fallo, de los defectos que se señalaron en la sentencia y que "trabajará de forma coordinada con ésta" para lograrlo. 

De esta forma, no renuncia a su proyecto y está dispuesta a aportar más documentación y a corregir posibles errores para que se autorice.

Como ha defendido en otras ocasiones, la valorización de residuos es un sistema alternativo para generar el calor que necesita para su producción que están adoptando todas las cementeras en Europa, porque la propia UE y el Gobierno de España lo consideran más sostenible que los combustibles fósiles. 

No obstante, en muchos núcleos de población (como en Alcalá de Guadaíra o Córdoba) ese criterio se ha topado con el de la administración local, que lo ha rechazado por otros posibles impactos que pueda tener en la población más cercana. También se ha topado con un importante rechazo ciudadano. 

La empresa tiene recurrido en la actualidad la modificación puntual del PGOU que se aprobó en el Pleno del Ayuntamiento de Alcalá de Guadaíra para no permitir esa valorización de residuos a menos de dos kilómetros de zonas urbanas, en tanto que considera que se hizo ex profeso para impedir el proyecto de esta cementera, asentada en la zona desde 1964.