Brócoli esparragado: la receta de las abuelas sevillanas con un sabor que no te dejará indiferente

El brócoli se ha convertido en un imprescindible de la cocina española. Su gran cantidad de propiedades y beneficios, así como la versatilidad que ofrece a la hora de prepararlo, lleva a que cada vez se ideen nuevas recetas a su alrededor. Según la Fundación Española de Nutrición (FEN), “una ración de 200 gramos de brécol aporta casi el doble de las ingestas recomendadas de vitamina C para un adulto, de entre 20 y 39 años con actividad física moderada”. Además, su aporte calórico es tan bajo que muchas personas lo incluyen en sus dietas para adelgazar.

Incluso, si alguien no es precisamente un amante de su sabor, puede también encontrar opciones para consumirlo que sean realmente irresistibles. Es el caso del brócoli esparragado, la receta de las abuelas sevillanas que, lejos de ser una nueva apuesta, recupera lo mejor de la cocina tradicional. Con un toque, eso sí, muy especial para todos los gustos.

El auge de las verduras esparragadas

“Las verduras esparragadas son siempre un acierto, cocinadas con esa combinación de especias tan característica de la gastronomía sevillana”, cuenta María José MR en la página web de Cookpad, donde comparte el paso a paso de este imprescindible de la cocina saludable. “De esta forma, conseguimos que nuestros hijos las disfruten guisadas, en un apetecible plato caliente que les sentará de maravilla”.

Tal y como indica la Guía Repsol, “el ‘esparragado’ es una receta tradicional que encumbra a un producto tan agreste como el espárrago. Ahora bien, este tipo de guiso se extiende a innumerables platos y recetas, como la que vamos a ver a continuación.

Brócoli esparragado: receta paso a paso

Como indica María José MR, podemos elaborar este plato tradicional en solo tres pasos diferenciados. Es el momento de coger un lápiz y un papel, anotar bien cada punto y proceder a su preparación:

• En primer lugar, es necesario hervir el brócoli y reservar el agua resultante de la cocción con el fin de añadirlo después de haber sofrito los ajos. Algo que deberemos hacer junto al brócoli ya hervido. Luego, rehogamos unos cinco minutos.
• A continuación, tenemos que añadir la pastilla de caldo, la sal y las especias a nuestro gusto. Precisamente, es en este punto cuando podemos jugar a ser todo lo creativos que queramos. Una vez hecho esto, cubrimos el guiso con agua y lo dejamos cocinar a fuego medio hasta que el brócoli se ponga tierno.
• Cuando observemos que el caldo se ha reducido, estará listo y en su punto. Entonces, solo tendremos que dejarlo reposar unos minutos antes de servirlo. Así de sencillo.
• Según María José, “debe quedarnos bastante caldo para que no resulte seco, ya que de esa forma sienta mucho mejor en épocas de tanto frío como estas”. Por último, y a modo de sugerencia sugerencia, añade otra posibilidad más para enriquecer el plato: “podemos agregar un huevo por comensal, de manera que se cuaje en el guiso”. De esta forma, “será más contundente a la hora de comer” y podremos disfrutar de una buena comida casera, saludable y en la cantidad necesaria para afrontar el día.