Astilleros de Sevilla puede perder uno de sus tres pedidos en cartera

Dentro de la crítica situación económica por la que pasan los astilleros de Huelva y Sevilla es parte importante el retraso en la construcción de los barcos que el grupo tiene en cartera. De los seis totales, sólo uno, el 827 (que la pasada semana salía hacia Gibraltar) está prácticamente ejecutado, mientras que otros dos de Huelva están paralizados (tras problemas de financiación del armador) y prácticamente lo mismo ocurre con los tres que se construyen en Sevilla.

De hecho, el armador de uno de los barcos de Sevilla, el Viking Line, ha comunicado por escrito su intención de rescindir el contrato por las "condiciones accionariales que presenta la empresa" y asevera que, si en una semana no se solventa el futuro de la compañía, cancelará definitivamente el pedido. Mientras, el armador de los otros dos buques en construcción (de apoyo a plataformas petrolíferas) también ha expresado su disconformidad por el retraso en el contrato. Y las pérdidas serían comunales: al estar avalados los buques por la Sociedad de Pequeños y Medianos Astilleros en Reconversión (Pymar), en la que participa la Junta de Andalucía, la cancelación supondría unas elevadas pérdidas por cada barco si no consiguen venderse.

La falta de financiación (162 millones de euros de la deuda de Huelva es financiera) y la imposibilidad por parte de Pymar de avalar más créditos y proyectos, según fuentes de la negociación, está detrás de los retrasos en ambos astilleros, con la factoría sevillana prácticamente paralizada por la falta de material.

Para capear el temporal, las empresas que conforman la industria auxiliar de Astilleros de Sevilla negocian con la Junta la posibilidad de entrar en la propiedad de la factoría como socio inversor. Para la atarazana hispalense existen otros dos inversores que ya han expresado su firme propuesta de entrar en el accionariado mediante una ampliación de capital para relanzar el astillero, después de una valoración realizada por una empresa de prestigio que permitiría a los actuales propietarios permanecer en el accionariado en función del valor que se le otorgue a la empresa en la actualidad.

Respecto a la planta de Huelva, la Administración asegura contar con cuatro nuevas industrias que se instalarán en Huelva, en un plan de reindustrialización cuya elaboración se inició hace meses. Astilleros se pronunciará hoy sobre estos planes.