Para los aficionados recalcitrantes a los videojuegos, la palabra caja en inglés, box, tiene un significado especial. Es algo más que un contenedor donde hay cosas. Más que una caja, es una puerta a la conquista de nuevos mundos de aventura, terror, drama y fantasía. De una contracción del término DirectX Box, una referencia a gráficos API de Microsoft (DirectX), nació el nombre de la consola que iba a poner en entredicho la hegemonía de Sony en el mundo de las consolas: la Xbox fue lanzada al mercado por Bill Gates tal día como hoy el año 2001, hace ya 17 años. En su momento, compitió ccon el servicio en línea de Dreamcast, pero más tarde compitió principalmente con el servicio en línea de PlayStation 2.

Cuatro ingenieros del grupo DirectX hicieron los esfuerzos necesarios para convencer a Bill Gates del enorme riesgo que se corría debido al éxito de los gigantes asiáticos Nintendo y Sony: "Los contenidos de entretenimiento requieren un dispositivo de entretenimiento", dijo el líder del equipo, Ted Hase, en una reunión privada sucedida en las entrañas de Microsoft el 5 de abril de 1999. Habían pasado meses desde que Sony mostró el prototipo de la Play 2.

Más de dos años después, nació la primera versión de la Xbox, que era en el fondo un Pentium III con un sistema operativo especial para aprovechar el catálogo abundante de las PC de escritorio (los desarrolladores no tendrían mayor problema en adaptar los títulos originales a los de la consola).

"Lo que comenzó con el nombre secreto Proyecto Midway, encabezado por Jonathan Seamus Blackley y tres subordinados muy rebeldes, se convertiría en Xbox, una división que le daría millones y millones a Microsoft", cuenta el periodista Dean Takahashi en el libro Opening the Xbox: Inside Microsoft's Plan to Unleash an Entertainment Revolution.

Jugar en línea, todo un invento

La Xbox Live fue un éxito debido a los mejores servidores, características tales como una lista de amigos y títulos de referencia como Halo 1 y Halo 2, el primero lanzado el mismo día del Xbox y el segundo lanzado en noviembre de 2004. El tiempo y los diversos estudios realizados a lo largo de los años han demostrado que jugar en línea es la parte más adictiva de las consolas.

Una imagen de la Xbox One, que fue lanzada en noviembre de 2013.

Tras la Xbox, la mejorada Xbox 360 (lanzada al mundo entre 2005 y 2006) y la Xbox One (videoconsola de octava generación que fue presentada por Microsoft el 21 de mayo de 2013), el modelo de consola de Microsoft sigue en plena forma con su última versión, la Xbox One X (año 2017), que mejora la que salió en 2016 con su alta definición en 4K y que tiene un disco duro que no vibra al adaptar pequeñas gomas que mantienen el disco en su sitio.

Es muy reseñable la forma de la fuente de alimentación interna y lo bien que se acoplan todos los componentes para garantizar un espacio mínimo. Y es que, si el disipador funciona, no hay problemas de calentamiento. Sus gráficos, la fluidez del sistema operativo y los frames por segundo ofrecen una jugabilidad única.

La GPU de 6 teraflops de la Xbox One X permite que los personajes y los entornos 4K sean más realistas que nunca, con un mayor nivel de detalle y animaciones más fluidas.

Los jugadores habituales alaban también la ergonomía del mando, que es mejor para muchos que el de la PlayStation 4. En definitiva, esa puerta lúdica que se abrió hace hoy 17 años continúa ofreciendo un mundo de ficción cibernética que atrapa al gamer... aunque hay que saber cerrarla de vez en cuando para afrontar la realidad.