La Ventana
Luis Carlos Peris
El drama de los sin techo
Amanece uno de los vértices del verano de siempre, día de Santiago como explosión de vida en la Compostela que en esta fecha se vuelve multitudinaria y festividad de San Jaime en un Levante plagado de ferias en las que la pólvora es elemento imprescindible. Por aquí abajo la reconversión laica del calendario hace que no luzca en rojo por los almanaques, pero antaño era tan festivo como ahora lo es por todos esos lugares de la piel de toro. Cuando entonces, con el 18 de julio, este 25 formaba con el día de la Virgen de agosto la trilogía festiva para el éxodo masivo en un tiempo en el que la temporada de veraneo quedaba sólo para unos muy pocos privilegiados. El resto, a esperar los números rojos del calendario para la excursión; entre dichos números coloreados, este día de Santiago que ahora viene negro como la noche y en el que la Velá trianera es aquí el único motivo festero al que agarrarse. Los tiempos son lo que son, pero no está de más recordar lo que este día significaba en nuestro verano.
También te puede interesar
Lo último