La nueva estación ITV hará 54.000 inspecciones anuales

El Ayuntamiento de Sanlúcar la Mayor ha cedido a Verificaciones Industriales de Andalucía (Veiasa) los terrenos para la construcción de una nueva estación ITV en su término municipal. Recientemente se ha presentado el proyecto de la nueva estación y se ha solicitado la licencia para comenzar las obras. El objetivo es aumentar la capacidad de inspección de las estaciones de ITV y reducir los tiempos de espera de la ciudadanía.

Esta nueva estación mejorará la prestación de este servicio a los ciudadanos de la provincia que, actualmente, tienen a su disposición otras 10 estaciones situadas en Gelves, La Rinconada, Alcalá de Guadaíra, Utrera, Écija, Carmona, Cazalla de la Sierra, Lebrija, Osuna y Sevilla capital. A ellas se sumará la ITV de Morón de la Frontera, cuyas obras comenzaron el pasado mes de junio. La nueva estación de Sanlúcar la Mayor se edificará sobre una parcela de terreno de 5.000 metros cuadrados, situada en la ampliación del Polígono Industrial y de Servicios Solúcar, y prestará servicio a 18 municipios de la provincia: Albaida del Aljarafe, Aznalcázar, Aznalcóllar, Benacazón, Bollullos de la Mitación, Carrión de los Céspedes, Castilleja del Campo, El Garrobo, Espartinas, Gerena, Huévar, Olivares, Pilas, Salteras, Sanlúcar la Mayor, Umbrete, Villamanrique de la Condesa y Villanueva del Ariscal. En total, una población de más de 120.000 habitantes se beneficiará de las nuevas instalaciones. Además, se aliviará la demanda que actualmente absorben las estaciones de Gelves y la Palma del Condado, principalmente.

Esta infraestructura elevará a 48 el número de líneas de inspección de la provincia y aumentará su capacidad a más de 750.000 inspecciones al año. Además, supondrá la creación de 18 puestos de trabajo directos, a los que hay que sumar el empleo indirecto relacionado con el mundo del motor que se genera en torno a un equipamiento de este tipo.

Las futuras instalaciones dispondrán de una superficie construida de 2.620,90 m2, distribuida en una zona de oficinas y cuatro líneas de inspección (dos para vehículos ligeros y otras dos de tipo universal), y una específica para ciclomotores y motocicletas. Todo ello le dará una capacidad para realizar 54.000 inspecciones al año, lo que cubre totalmente la demanda de la zona, situada en más de 40.000 inspecciones anuales.

Gracias a la nueva estación, la distancia media que tendrán que recorrer los ciudadanos de la zona para ir a la ITV se reducirá unos 14 kilómetros, ya que los 24 km que en la actualidad tienen que recorrer para pasar la ITV se quedarán en 10.

Esto permitirá un ahorro de 1,4 millones de kilómetros al año en desplazamientos (22.000 horas de conducción) y 111.000 litros al año en combustible que, en términos económicos, suponen 155.000 euros al año, al precio del combustible de hoy día. Además, evitará la emisión a la atmósfera de 210 toneladas de dióxido de carbono.