Betis | Análisis

El termómetro puesto en Heliópolis

  • El encuentro frente al Espanyol medirá el sentir de la grada tras la debacle frente al Levante y la decisión de la cúpula dirigente de mantener a Setién

Setién dialoga con Emerson en el entrenamiento matinal de ayer.

Setién dialoga con Emerson en el entrenamiento matinal de ayer. / Juan Carlos Muñoz (Sevilla)

El Betis recibe mañana al Espanyol en un partido que servirá para calibrar la temperatura de la afición verdiblanca en torno a su equipo, el entrenador y la cúpula dirigente.

Un termómetro en Heliópolis para medir las sensaciones que tiene la parroquia bética después de la última debacle en el feudo del Levante y la decisión tomada por los principales rectores sobre el futuro de Setién, que ayer prosiguió con la preparación del encuentro ante los pericos con total normalidad en la ciudad deportiva. Todo eso merodea en el ambiente de un partido con tintes de plebiscito.

En el Ciutat de Valencia, el técnico bético ya se mostró seguro de que iba a seguir en su cargo

La tensión en el termómetro de Heliópolis subió con el 4-0 y la mala imagen que el Betis dio en el Ciutat de Valencia, centrándose todo el foco en la figura de Setién, que en la rueda de prensa posterior al choque se mostró confiado en su continuidad, como así ha pasado. La hinchada heliopolitana, ante Getafe y Valencia, mostró su enfado hacia la figura del preparador cántabro, pero éste se mantiene en el puesto con el respaldo absoluto del vicepresidente y el presidente, José Miguel López Catalán y Ángel Haro.

Casi dos días tardó el club verdiblanco, y con un comunicado, en ratificar la continuidad del cántabro

Así, el pasado viernes, pese a las diferencias de opiniones existentes en la cúpula dirigente durante las reuniones existentes el jueves, con la figura de Lorenzo Serra Ferrer presente, el club verdiblanco emitió un comunicado en el que ratificó la continuidad de su entrenador hasta el final de temporada, a la espera de una evaluación global del curso al término de la presente campaña.

La falta de consenso entre Haro, Catalán y Serra ha quedado patente a la hora de tratar el futuro de Setién

Casi dos días después, y sin que el aficionado bético recibiera explicación alguna por parte de sus dirigentes, tras lo sucedido en la capital del Turia, esa nota de prensa de la entidad de la Palmera puso fin a la incertidumbre en torno a la figura de Setién, que ayer continuó con la preparación del choque ante el conjunto espanyolista en otra sesión de trabajo en la ciudad deportiva en la que William Carvalho volvió a quedarse al margen de sus compañeros, recuperándose aún de su fractura nasal y de los problemas de aductor que sufrió en el derbi de Nervión.

La hinchada bética ya mostró dos veces su veredicto sobre la figura del preparador verdiblanco

Por este motivo, su ausencia en el entrenamiento de ayer complica mucho su participación en el partido de mañana en el Benito Villamarín, siendo ya el tercer encuentro seguido que el centrocampista portugués se perdería en este tramo final del campeonato, ya que no estuvo ni ante el Valencia ni frente al Levante. Por lo demás, el preparador heliopolitano tiene disponibles a todos sus futbolistas.

Así se presenta un duelo que servirá para medir el sentir de la parroquia bética, en la que dos de sus principales grupos de animación mostraron días atrás sus medidas de protesta por todo lo sucedido esta temporada. También se podrá comprobar si el empate del Athletic en casa ante el Alavés (el Betis queda a siete puntos del equipo bilbaíno, más el goal average, a la espera de su cita ante el Espanyol) calma algo los ánimos del público bético. Mañana, el termómetro estará puesto en Heliópolis.

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