Mariano, historia de un fugitivo

Llevaba cuatro años escapando de la Justicia, hasta que la Guardia Civil lo localizó en Las Cabezas de San Juan. MarianoH. S. tenía varias órdenes de búsqueda y captura en vigor cuando fue arrestado, a principios de octubre. Ya ha regresado al centro penitenciario de Sevilla-II, donde sigue cumpliendo las penas que tenía pendiente antes de que se escapara. Entre ellas destacan una por un homicidio en grado de tentativa y otra por agresión sexual, pero uno de sus antecedentes más curiosos fue por su participación en un singular robo de cupones premiados.

En el año 2012, Mariano fue detenido por robar dos cupones premiados a una pareja de toxicómanos, que habían acudido a las Tres Mil Viviendas a comprar droga. Llegó a cobrar parte del premio, que era de 120.000 euros. La Policía lo detuvo con otras cinco personas por este robo.

Los drogadictos habían sido agraciados con sendos premios de 60.000 euros de un sorteo extraordinario que se había celebrado en verano. Las víctimas compraron los cupones en un bar de Torreblanca y se los robaron en las Tres Mil Viviendas, donde mediante engaños los mantuvieron contra su voluntad en el piso de uno de los ladrones mientras éstos cobraban los premios en una sucursal bancaria.

La investigación en la que acabó detenido se inició a raíz de una denuncia recibida por el Grupo de Atracos de Sevilla, en la que una de las víctimas decía que estaba en casa de unos amigos con uno de los cupones premiados y que cuando salía del bloque, tres encapuchados le tiraron al suelo y le quitaron los pantalones, llevándose así el cupón agraciado. Confesó que por miedo a que le fuera sustraído el segundo cupón se hospedó unos días en casa de otros conocidos del mismo barrio, quienes se ofrecieron a darle protección y cobrar el premio en su nombre, prometiendo que le entregarían la totalidad del dinero, pero que sólo le dieron 30.000 euros.

Los agentes constataron que durante el mes de agosto una de las víctimas compró dos cupones para el sorteo extraordinario de verano en un bar de Torreblanca. Cada cupón resultó agraciado con 60.000 euros el día del sorteo, así que el denunciante se dirigió con su pareja sentimental a la zona de Las Vegas con la intención de adquirir sustancias estupefacientes, portando consigo uno de los cupones y escondiendo el otro en el hostal donde pernoctaban. Su proveedor de drogas habitual le propuso el pago en metálico de uno de los cupones para blanquear el dinero del narcotráfico, ofreciéndole 4.000 euros más sobre el premio por el negocio.

Una vez el traficante se aseguró de que portaba uno de los décimos le dijo que no había acuerdo y le invitó a dejar el piso. Allí mismo, familiares del traficante ya prevenidos por este, le dieron una paliza y le amenazaron con un arma de fuego para sustraerle el cupón que portaba aún antes de abandonar el bloque donde había ido a "pillar" droga. Tras esto, hicieron creer a la pareja que había una familia muy peligrosa de las Tres Mil Viviendas que pretendía robarles el otro cupón, y que los matarían si salían de un piso vigilado por la familia del narcotraficante.

De esta forma, acompañado y vigilado en todo momento, se personaron en el lugar donde tenía escondido el cupón que le quedaba y lo recuperaron, trasladándose todos hasta el piso franco con la excusa de protegerlos hasta que cobraran este segundo décimo, y prometiéndole que luego le harían entrega del premio íntegro en metálico a excepción de una pequeña cantidad que se quedarían a cuenta de los servicios de protección prestados.

No conformes con haberle sustraído uno de los cupones premiados, una vez ingresaron el premio del primero en su cuenta corriente se apropiaron de 30.000 euros del segundo, amenazándole de muerte cuando les pidió que le entregaran el resto del premio. Los policías entraron y registraron los domicilios de los encartados, y detuvieron de manera simultánea a los delincuentes y recuperaron unos 600 euros en efectivo y 10.000 en una cuenta bancaria, la misma en la que se ingresó uno de los cupones. Mariano fue uno de los seis detenidos e ingresó en prisión tras este arresto.

Al año siguiente se vio involucrado en el intento de homicidio por el que fue después condenado. En 2011 también fue detenido por la Unidad de Drogas yCrimen Organizado (Udyco) de la Policía Nacional, que le encontró en su domicilio 180 papelinas de cocaína y heroína y cinco mil euros en efectivo, así como balanzas y otros útiles para la preparación y venta de los estupefacientes.

Tras pasar unos años en prisión, se fugó hace cuatro y estaba siendo buscado por las autoridades desde entonces. Sobre él pesaban varias reclamaciones judiciales, entre ellas dos requisitorias de búsqueda, detención e ingreso en prisión.

La Guardia Civil deLebrija tuvo conocimiento en septiembre de que podía encontrarse escondido en Las Cabezas, donde residía con su familia. A raíz de esta información, los agentes del instituto armado iniciaron un dispositivo de vigilancia y seguimiento en torno al domicilio en el que podía estar viviendo, hasta que pudieron confirmar que el sospechoso residía allí.